L'Avi Freu en L'Escala

Comimos muy bien, te aconsejan lo que pedir, todo muy bueno.

Una experiencia increíble desde que llegamos. El restaurante tiene un ambiente muy agradable y el aroma a mariscos recién preparados abre el apetito de inmediato. La paella de mariscos fue sencillamente espectacular: abundante, con un sabor auténtico y llena de ingredientes frescos. El servicio fue rápido, cordial y siempre con una sonrisa. Un lugar que combina calidad, buen sabor y hospitalidad. ¡Muy recomendable!

Servicio bueno, y menú muy rico por 28€ a mediodía. Recomiendo reservar. Los calamares especialmente buenos, y el fideuá también. Tienen terraza al lado del paseo. El menú no incluye bebida pero si postres

Calificación incomprensible. Leer las reseñas. Ciertamente, los menús son un poco caros en comparación con los alrededores, pero la relación calidad-precio es innegable. La bienvenida del dueño y de "Michel" es de primera (se esfuerza en hablar francés y explicar el origen de los ingredientes). Pedimos el menú de 28 € y bueno... ¡no nos arrepentimos! La paella estaba de primera, la mejor que hemos comido en Lescala hasta ahora. ¡Y los postres caseros están deliciosos! Repetiremos. P.D.: quédense con los entrantes y especialidades de marisco.

La comida estuvo deliciosa. Por 28, tienes 3 opciones. Recomiendo calamares y luz al cava. ¡Y de postre, massinii! El servicio fue muy bueno, ¡volveré!

Un sitio espectacular para los amantes del marisco. Todo con mucho sabor y servido con mucha amabilidad.

Menú de 28 eur sin bebidas. La comida muy buena, ambiente tranquilo y servicio muy atento. Recomendable

Marisquería y arrocería con historia (abiertos desde 1984) y muy bien situada en el paseo Lluís Albert, con una terraza frente al mar que hace que esté la mar de bien. Nos detuvimos por casualidad, en plena hora de comer, y optamos por el menú de 28 €. De entrada nos obsequiaron con un pan con tomate con anchoas y unas aceitunas. Elegimos calamares a la plancha y un tártaro de salmón y anchoas con aguacate, y de segundo un arroz negro con gamba, sepia y pulpo. Para nuestra sorpresa era caldoso, bastante gustoso y bien conseguido, aunque los trozos de sepia eran demasiado grandes y gruesos para nuestro gusto. De postre, helado de turrón y una tatin de manzana casera con helado que redondearon muy bien la comida. El servicio fue rápido y atento, y el ambiente en la terraza, con la brisa marina, muy agradable. Un sitio sin grandes pretensiones, pero que nos sorprendió gratamente y que vale la pena conocer.

Ante todo, la comida está muy buena. Comimos de menú y había una buena selección para elegir. Mis pegas están entorno al precio (me parece que casi 30€ de menú es excesivo, sobre todo teniendo en cuenta las cantidades de comida, que son escasas). No recomiendo el tartar en absoluto. La paella de la casa estaba buena, aunque había mucho arroz (una capa de dos dedos de arroz en una paella pequeña) y poco “bicho”. Al final se paga mucha ubicación. Había muchas camareras (las cuales casi ninguna hablaba español, solo francés o catalán) pero solo nos podía tomar nota “el jefe”, como lo acuñaron ellas. El jefe no sabía (o no quería) hablar en español con nosotros y se hacía el sueco todo el rato cuando intentábamos comunicarnos con él. Curiosamente luego le escuché hablar en español con alguien en la cocina. Me pareció un gesto muy feo. No repetiría.

L'Avi Freu ya no es el referente que fue. Conozco ese restaurante desde hace unos 30 años aproximadamente y puedo decir que vive de la fama que obtuvo. Dos ejemplos: Si pido mejillones al vapor, espero unos mejillones simple hechos al vapor, calientes y sin aderezos y no unos mejillones tibios con salsa de mostaza. La paella del senyoret debe ser una paella clásica que me permita ingerida sin hacer filigranas con los cubiertos para pelar gambas , langostinos o escamarlans o mancharme las manos. De ahí su nombre del senyoret. ¿Por qué a esa paella se le incorporan trompetes de la mort? Si buscase innovaciones, buscaría otros restaurantes. Si iba a este era por su cocina marinera de siempre. La próxima visita a L'Escala visitaré otro restaurante, que los hay, donde comer sin sorpresas.