Las Vigas (H. Real Monasterio San Zoilo) en Carrión de los Condes

Un lugar excepcional y maravilloso. Muy cuidado y con habitaciones muy cómodas y acogedoras, pero falla la insonorización pues oímos a los vecinos de habitación hablando hasta las 2 de la mañana.

Solo visité el restaurante. El entorno espectacular, lo que es un antiguo monasterio perfectamente rehabilitado, en un entorno que invita al descanso. No me extraña que el hotel tenga éxito ya que unos días garantizan seguro una cura de stress. Entorno tranquilo, elegante, con muy buen gusto. Ya habria que pagar por disfrutar el atronador silencio que te rodea... La estructura de madera que soporta la cubierta de el restaurante, habilitado en lo que sería una zona de almacén, no solo es singular sino muy original y agradable. El servicio está a la altura. Un gazpacho entrante de la casa, muy bien preparado, te recibe y avisa de lo que viene. Entrantes de salchicha de burgos, servidas sin "piel", elevan esta modesta materia prima al rango de bocado exquisito. Y que decir del cordero, podrían ahorrarse los cuchillos ya que el tenedor es suficiente para desmembrarlo y comerlo, pura mantequilla en forma de carne. El complemento imprescindible de una austera ensalada de lechuga y tomate, lo suyo para un cordero, y el buen surtido de panes hacen que quieras rebañar el plato, aunque el entorno elegante lo desaconseja. Todo servido a su tiempo y en su punto. Lastima que al ir de viaje tuve que evitar el vino (¡sacrilegio!, mea culpa), y no tomar postre para que los km se me hicieran más cortos... La próxima vez tomaré vino, postres y me hartaré de entrantes, ya que estaré alojado en el hotel y podré olvidarme de estas limitaciones.

Somo clientes habituales. El lechazo muy mejorable, estaba recalentado. En cuanto al bacalao, poco fresco y demasiado hecho. En lo que respecta al servicio, hay un camarero con una actitud bastante mejorable. Trabajando cara al público hay que saber tratar y ser más agradable.

Excelente, buen trato y atención, el marco es incomparable y la comida exquisita, el entorno maravilloso, convento del siglo X con historia para aburrir

Me encanta la musica de gregoriano q ponen en un salon sin embargo dn la cafetería pedi q bajarsn la musica q tenian un pico demasiado alta. Creo q vamis a estos hoteles buscando tranquilidad.

Bonito lugar...pero oír constantemente canto gregoriano de fondo como que no me gusta..por lo demás todo muy bien

De mayores quieren parecerse a un Parador. Las habitaciones son amplias pero discretas en cuanto a comodidades. El restaurante me ha parecido normal, tirando a bueno si uno va con hambre y le da igual todo. Ahora bien, los precios están bastante por encima de la calidad. Y un detalle feo: antes de ver la carta, te ponen un aperitivo que luego te cobran a 2,60 €. Luego en la factura lo justifican como pan artesanal.

Gran restauración de monumento que da lugar a un hotel muy interesante.

hemos estado recientemente en la boda de un amigo, nos ha gustado mucho, las habitaciones cómodas y en un edificio histórico con un pueblo y alrededores espectacular.

Excelente lugar, comida de 10, atención inmejorable y entorno tranquilo perfecto para desconectar y descansar, perfecto para huir del bullicio de la ciudad!