La Marmita de Ancha en Cádiz

Recogían la mesa con demasiada frecuencia. El entrecot de 300 gramos más pequeño que he visto.

Buen sitio para comer aunque escaso las raciones pero lo peor fue la tarta de queso que es incomible

Venimos de Alemania y tenemos un pequeño piso en Cádiz. Cádiz tiene una gran gastronomía, pero la experiencia en La Marmita lo supera todo. Es nuestro restaurante favorito y volvemos siempre que podemos. El chef es un artista y el servicio es muy convincente, amable y profesional. Solo puedo decir gracias.

Este lugar se especializa en todo lo relacionado con el Atún, famoso en Cádiz. Comimos 3 variaciones de atún azul en credo y ligeramente asados. Esta es una experiencia y difiere de todo lo que probamos antes en cualquier otro lugar.

En general, nos decepcionó este restaurante con calificación Michelin en Cádiz. Nuestro primer entrante, la ensalada de langostinos, no se limpió, lo que afectó el sabor del plato. Nos quejamos de esto y el chef reconoció que podría ser mejor. El plato todavía estaba cargado. También comimos dos platos de atún, la especialidad de la casa. Una degustación de atún crudo fue excelente. Un ventresca al horno era bueno, pero no especial. Los camareros fueron muy amables. La mesa era extremadamente pequeña.

Cada plato q probamos fue una experiencia y deliciosos. Servicio impecable. Ambiente acogedor. Me encantaría volver.

El mejor lugar para comer atún fresco de almadraba. Precios alto , pero vale la pena

Buena comida, buen ambiente pero, aquí está la cuestión, parte de la bienvenida debe incluir una invitación a tomar una copa. Sentarte en una mesa sin beber durante 15 minutos y pierdes mucho ambiente y ímpetu. Quizás sea sólo yo, pero no sucedería en Sanlúcar de Barrameda, donde las cosas van mucho más rápido ahora.

No nos convenció aunque el local y el servicio estuvieron muy bien. Los lingotes de foie micuit recubiertos con frutos rojos, estaba demasiado frio y demasiado dulce, el calamar de potera a la plancha, demasiado sofisticado, la presa ibérica algo seca y un poco dura y el tartar marinado de atún, sosito. Igual es que no acertamos pidiendo.

Todo muy bien excepto el tema vinos. No es de recibo que carguen un 300% los vinos, están matando un producto estrella de nuestra gatronomía. Pedí, recomendado por el camarero, un vino que no conocía que en la carta marcaba 27€ y en la tienda lo venden a 9€. El restaurtante lo debe de comprar aún mas barato. Todas las mesas de mi zona estaban bebiendo agua o cerveza; eran locales y más listos que yo.