La Mafia Se Sienta a La Mesa - Málaga en Málaga

Muy correcto todo: te atienden rápido y bien, la comida está buena, son generosos con las cantidades y los precios son adecuados. Gracias.

Buen sitio, comida rica y buen servicio. Si me pusiera a sacarles pega… los cuchillos no cortan, todo lo demás un 10. En cuanto al precio creo que al final pagas el buen sitio, el bien trato de los camareros y la calidad del producto.

Somos clientes recurrentes en esta sede y es que siempre quedamos satisfechos, hoy hemos probado dos nuevos platos de la carta, Gnocchi molto molto gorgonzola con jamón ibérico Bogavante a la parrilla con tagliatelle nero, la verdad una delicia muy recomendados, Paola siempre muy atenta y dispuesta a darnos recomendaciones .

Servicio bueno, comida de buena calidad, quizás un poco cara. Ambiente bueno aunque espacioso, esto hace que con mucha gente sea ruidoso.

¡Un restaurante encantador! No está muy lleno y el servicio es excelente. ¡La comida me impresionó mucho! Sabores deliciosos y una presentación impecable. Sin duda volvería a comer aquí.

La comida riquísima!! Pero lo mejor ha sido la atención de Ariana, nos ha recomendado, ha sido súper simpática y agradable, que eso siempre se agradece, volveremos seguro!!

Estuvimos el sábado en La mafia del centro comiendo un grupo de chicas y todo súper bien, nos atendió Paola y fué un encanto y súper atenta. Es una alegría encontrarte personas que te atiendan tan bien. 🤩

Una experiencia realmente inolvidable. Eramos un grupo de unas 22 personas, para la celebración de un cumpleaños. Desde el primer momento nos recibieron con una calidez y cercanía que no siempre es fácil encontrar. El local es precioso, pero lo que marca la diferencia de verdad es su gente: gracias a LUIS, Karima y Fernando, cada detalle estuvo cuidado y nos hicieron sentir como en casa. Su dedicación fue más allá de lo habitual: nos ofrecieron un servicio rapidísimo, con comida abundante y deliciosa, y estuvieron siempre pendientes de que no nos faltara ni la bebida ni una sonrisa. Nos conmovió especialmente la atención al cumplir años: llevaron la tarta para que pudiéramos soplar las velas y compartieron nuestra ilusión como si fuese un festejo propio. Tener barra libre y vinos de calidad fue la guinda del pastel, pero, sin duda, lo más valioso fue sentir cómo cada miembro del equipo volcaba su cariño en ofrecernos el mejor momento posible. Recomiendo este lugar con todo mi corazón, porque, aunque su belleza salta a la vista, lo que de verdad lo hace grande es el amor y la dedicación de las personas que trabajan allí. ¡Sin ellas, nada tendría el mismo valor!

Desde que llegamos Adriana la camarera que nos correspondía fue muy atenta servicial simpática y educada y estuvimos muy a gusto como siempre, la comida el ambiente jovial y el sitio co O siempre muy a gusto

La comida es correcta, buena en algunos platos (pedimos cuatro de la carta). El servicio, en cambio, francamente, es muy mejorable. La camarera que nos atendió desconocía la carta y hubo que indicarle varias veces los platos en cuestión. Lo correcto, por otra parte, es que todos los platos salgan más o menos de forma simultánea. Salieron dos de ellos y los otros dos se demoraron un tiempo considerable. Al finalizar la cena, indisimulada actitud para que nos fuéramos cuanto antes (eran las doce de la noche). En fin... ¿comida? no está mal. ¿Servicio? Muy, muy mejorable.