La huerta de la abuela en Marín

La comida está rica y el precio bastante bien, pero la atención deja un poco que desear. Primero reservamos con unas semanas de antelación para el viernes a las 15h. Nos llaman el día antes para decirnos que como tienen mucha gente tenemos que estar allí a las 14:45 o perdemos la mesa, cosa que nos iba a ser imposible porque ya avisamos que teníamos un acto y por eso reservamos inicialmente a las 15, que nos lo tenían que haber dicho…finalmente el mismo día nos toca salir corriendo para llegar a la hora que nos han dicho, nos sentamos directamente a falta de dos personas q tardaban dos minutos más en llegar, y nos dicen q a las 15:15 cierra la cocina así que tenemos que pedir ya lo q sea y los q estamos o no comemos…. Entiendo y soy la primera que cree que hay q respetar la hostelería y sus horarios, pero un fin de semana a las 3 de la tarde, es decir, a la hora de comer, que no hablamos de las cinco de la tarde, y tratándonos con amenaza y de mala manera me parece bastante vergonzoso, de hecho nos quedamos porque ya no teníamos otra opción pero está claro que no volveremos, lo mínimo era decirlo de buenas maneras o pedir disculpas, pero solo nos dijeron “es que cerramos porque aquí todos queremos irnos a nuestra casa y tenemos horarios”… a las 15 ya no se puede comer? es un restaurante, no tiene ningún sentido

Fuimos en grupo y comimos para compartir al centro.Muy buena relacion calidad precio,buen servicio y rapidos

Precioso restaurante! Muy satisfechos tanto por la comida, como el servicio, como el precio. Destaco las croquetas de cecina y cocido y las pizzas la de zorza y la de solomillo, que son las que elegimos nosotros y nos encantaron.

Se come muy bien y las raciones son grandes.

Una cena frugal pero muy salada, servida por una chica que parecía no tener ganas de trabajar. Correcto, pero muy seco. De todos los éxitos, el lugar es bonito y hermoso para cenar con amigos. Si le hubieras echado sal a la comida, habría sido un día tonto.

Maravillosa la comida. Los postres normalitos

Es diferente, abierto a la calle , bonito decorado,trato fantástico y muy buena comida

Hoy estuvimos 6 personas comiendo en este restaurante tanto la atención del personal como todo el menú que tomamos excelente, lo recomiendo, gracias por vuestra atención.

Fui con tres niños a comer y todo un acierto. Una carta muy completa, con un poco de todo. Pedimos solomillo (a los peques les encantó), una ensalada templada de espárragos (muy muy rica y abundante) y pizza. La pizza impresionante, pero aún así sobró y nos la prepararon para llevar. Todo excelente: comida, situación y servicio

Fuimos mi familia (marido y dos niños). Mejor reservar, así te quitas de no tener sitio. Llegamos antes y no tuvimos problema. La comida normal, pedimos croquetas variadas (cecina y jamón) muy buenas, un creps de pollo (normal), pimientos de piquillo rellenas de ajetra y gambas (no nos gustaron mucho) y lo mejor la pizza (la base buenísima)