La Cova Criolla en Besalú

Restaurante familiar, las pizzas muy ricas y el tiramisú casero espectacular. Nos atendieron genial.

Un sitio con muchísimo encanto en pleno pueblo medieval. Es una pizzería pequeña y familiar, de esas en las que se nota que todo se hace con cariño y a fuego lento. Pedimos un calzone y una pizza barbacoa, y madre mía, ¡qué cosa más buena! La masa casera estaba perfecta, crujiente por fuera y suave por dentro, y los ingredientes sabrosísimos. El ambiente es acogedor, te hacen sentir como en casa, y el olor a horno nada más entrar ya te dice que has venido al sitio correcto. Ideal para una cena tranquila disfrutando de buena comida casera. Sin duda, un pequeño tesoro escondido en el corazón del pueblo. 🍕🔥

Un lugar acogedor y con buen trato para disfrutar de una buena pizza o calzone. En mi caso fue una calzone, la he disfrutado muchísimo. Fuimos sobre las 19:30h y había sitio para poder comer en sus mesas, se llena rápido a partir de las 20:30h.

Muy buen servicio y pizzas muy buenas

Fuimos un grupo grande, nos sirvieron súper rápido y que gran acierto por que todas las pizzas están increíbles, de las mejores que e probado. No soy de la zona pero si vuelvo iré allí 100%

Deliciosa pizza y recomiendo 100% el Tiramisú - ¡delicioso!

Teníamos reserva en este restaurante de Besalú a las 14:30. Como vimos bastante movimiento de gente, nos acercamos un poco antes, sobre las 14:00, para asegurarnos de que todo estaba en orden. En ese momento una de las camareras nos dijo que para las 14:30 tendríamos mesa sin problema. Pero cuando volvimos a la hora de la reserva, nos llevamos la sorpresa: acababan de sentarse dos mesas nuevas y, de algún modo, nuestra reserva se había perdido. La única opción que nos ofrecían en ese momento era sentarnos en la terraza, bajo el sol de pleno agosto. Y claro, siendo 4 adultos con 2 niños pequeños, la idea no nos hizo ninguna gracia. Protestamos bastante, porque la situación nos parecía injusta, y al cabo de unos 30 minutos nos avisaron de que ya podíamos pasar al interior, en una mesa que había quedado libre. A esas alturas eran casi las 15:00 cuando por fin hicimos el pedido. La comida, eso sí, estuvo bien, correcta en calidad y sabor, aunque después de todo el embrollo se nos hizo difícil disfrutarla del todo. Salimos sobre las 16:30, con la sensación de haber pasado más tiempo esperando que comiendo. El coste total fue de 142,92€ para los seis, un precio razonable para lo que tomamos. Pero la verdad es que, teniendo en cuenta lo sucedido, nos quedó ese regusto agridulce de que, con un poco más de organización y cuidado en las reservas, la experiencia podría haber sido mucho mejor.

Pizza muy buena y muy bien de precio!! Y las empanadas también ricas

Hacía tiempo no comía algo tan bueno. Probamos una empanada de carne, una pizza de burrata y de postre un tiramisú. La calidad de los ingredientes y el tiempo que le dedican a los platos, hacen la diferencia. Súper recomendable.

Pizeria regentada por un italiano, calidad buena y pizzas ricas