El sitio es muy acogedor y la que atiende es muy buena persona, muy buena atención con los clientes y la comida deliciosa tanto para desayunar como para comer a las 2 de la tarde, vale la pena venir, un tesoro escondido.
Celebramos la comunión de mis hijas y fue espectacular. La comida riquísima, el ritmo de servicio perfecto, el trato espectacular desde la preparación días antes hasta el mismo día. Los invitados quedaron encantados. Con los niños el trato cercano y muy amable. Recomiendo 100x100. Fue un acierto en todos los sentidos