La cocina del Gaidovar en Grazalema

¡Qué joyita! La mejor comida que he probado en España. Tan buena que tuve que volver al día siguiente. Probé gran parte de la carta y me encantó todo. Las costillas fueron las mejores que he probado en mi vida y las albóndigas de cerdo también estaban perfectas. El personal fue muy amable y el chef salió a charlar con nosotros. ¡No puedo calificarlo lo suficientemente alto! 10/10

Increíble restaurante, comida con muy buen sabor y de calidad, muy acogedor el lugar y el personal. Muchísimas gracias, volveremos!

No nos extrañó que tenga 5 estrellas. Buscábamos un sitio tranquilo donde comer y vaya si acertamos. Es un local acogedor, con una camarera muy atenta que busca lo mejor para ti. En nuestro caso apostamos por unas gyozas de pato, croquetas (de jamón y de gambón), el brioche y el rabo de toro, a cada cual más sabroso. El precio es razonable y las cantidades también. Así que no te lo pienses dos veces.

Una locura ,experiencia inolvidable 🤭🫶

Vinimos hoy con la familia basándonos en las reseñas. Solo puedo confirmarlo. Excelentes anfitriones... comida deliciosa. Gracias.

Comida deliciosa, excelente servicio, muy recomendable.

Llegamos sobre las 22:00 cuando otros restaurantes ya sacaron la basura y cerraron sus puertas, aquí se nos recibió (4 personas) con amabilidad y un “por supuesto pueden aún cenar”. Lugar pequeño, pero decorado con mucho gusto: madera noble, iluminación perfecta, volumen de la música de fondo lo justo y solería hidráulica bonita. Servicio: siempre atentos a los tiempos, nos atendieron de maravilla, profesionales y simpáticos. El chef salió por iniciativa propia y nos explicó qué era lo que acompañó la selección de quesos locales: las dos mieles, una trufada, la otra de acacias, con todo detalle. Después nos decantamos tanto por compartir algunos platos como pedir los segundos individualmente. Sin problema alguno. Comida de fusión muy conseguida. ¡Bravo a semejante atrevimiento de combinar sabores, texturas y colores. Salimos encantados. Si hubiese habido el tinto de la carta que elegimos (Quādis crianza) y que desafortunadamente se les había acabado, le habríamos dado 6 estrellitas. Sigan así con esa intención de querer hacer las cosas bien, sin, por un lado pasarse con un cortejo exagerado por la clientela o por el otro caer en una rutina mecánica tan extendida en los destinos turísticos. Se comunican contigo mirándote a los ojos, sin más. ¡Gracias de corazón!

Buen servicio, comida excelente

El almuerzo estuvo genial Se puede sentir que la pareja encargada dirige este pequeño restaurante con amor. Sin duda volveremos a la cocina del Gaidovar.

Lo mejor que hay en Grazalema y alrededores. Disfrutamos de la comida dos veces y habríamos estado allí más a menudo si no nos hubiéramos ido. Todo es perfecto. Las croquetas, los pasteles rellenos, las sparibes. También pudimos compartir esto último, ya que muchas veces todo se ofrece en una comida para dos para que todos puedan probarlo todo. El menú está lleno de una variedad de platos sofisticados: ¡tapas refinadas! Y hay una muy buena selección de vinos. El servicio es muy atento, muy amable y personal. La relación precio-rendimiento es excelente. El restaurante en sí también tiene un ambiente muy acogedor. Te sientas afuera, cerca de la iglesia. Se recomienda hacer reserva.