La Caseria De Santa Marina en Llanes

Un gran descubrimiento! Como exquisita, trato inmejorable, con sitio para que los pequeños puedan jugar. Volveremos seguro!

Decoración muy bonita, entras y sientes la calidez de la leña en el fuego. Camarero muy amable y comida muy rica. Volveremos!

Tuve la oportunidad de cenar en el restaurante "La Caseria de Santa Marina" el verano pasado, durante una estancia en Llanes y debo decir que fue una experiencia realmente agradable. El restaurante está situado en una ubicación que no es precisamente céntrica, por lo que. ¡Sí, sólo se puede ir en coche! El restaurante es muy bonito, de madera, con algunas mesas que se colocan dentro de barriles de madera, tiene varios salones y además tiene mucho espacio exterior con otras mesas! El ambiente del restaurante es acogedor y relajante; El personal es muy amable y profesional, siempre disponible para responder nuestras preguntas y hacer recomendaciones. La carta ofrece una gran variedad de platos, cogimos tortillas, patatas fritas con huevos y tocino, filete de carne, selección de quesos, una salchicha con patatas y por último postres. Realmente todo muy bueno! Precios justos lo recomiendo mucho

Lugar precioso!! Original y con unas vistas espectaculares.

Era la primera vez que íbamos y me dejó la boca abierta. Entorno y local precioso. Nos quedamos en la terraza con la Perra que hacía muy buena temperatura y nos pedimos sidra y tabla de quesos que estaban espectaculares. Repetiremos sin duda porque nos encantó. Camareros muy atentos . Preciosa decoración

Cachopo que dejaba mucho que desear…por un precio en mi opinión demasiado elevado. Racion de patatas excasas, y tres pimientos que entre los tres hacían uno. Los camareros son agradables y la decoracion ambientado Un saludo

Restaurante con encanto que goza de una amplia terraza en la que poder comer con nuestro 🐶. Gastronomía asturiana recomendable calidad-precio.

Hemos estado varias veces y la calidad ha bajado con respecto años atrás, la comida mediocre, el pulpo a la brasa insulso y el entrecot muy normalito, mejor pedir otras cosas. El servicio, la chica eficiente y maja pero el resto que nos atendió, desganados

Situado en el campo, en una parcela muy amplia, cuenta con comedor interior (mención aparte unos toneles acondicionados para comer) y exterior, en mesas de madera del estilo de area recreativa. Comimos un grupo grande en el exterior, y a pesar de ser el puente de agosto nos atendieron razonablemente bien. La comida rica.

El sitio está en medio del monte, con unas vistas estupendas y con espacio para que jueguen los niños. Menú asturiano tradicional por 35 euros que no se puede compartir. Cantidades enormes. La parrillada de carne se supone que es para 3 personas pero éramos 5 adultos y nos sobró mucho. A mí personalmente me gustan mucho los tortos que hacen, la masa está riquísima, y también la bolla (morcilla asturiana). A destacar también los frisuelos, con la masa muy rica, y el arroz con leche, pasado de dulce pero con una capa de caramelo muy rica. La sidra, aunque es de las conocidas, para mí no es de las mejores. El personal amable. La zona interior está muy chula, se puede comer dentro de un tonel o en un gallinero. Hemos ido muchas veces y seguiremos yendo porque está muy bien. Ojo. Cuidado con la carretera porque es muy estrecha, no tiene ningún peligro, pero nos tocó de frente un camión trailer enorme y acabamos con el coche metido en la cuneta para poder pasar.