La barra de miceli en Inca

Simplemente ESPECTACULAR . Se nota la calidad del producto y hacerlo con cariño. Además son amables . Se merecen 100 estrellas .

¡¡Esto es realmente asombroso!! ¡El rendimiento del precio es excelente y sabe muy bien! El servicio es súper agradable y (no puedo decir lo suficiente) ¡la comida es excelente! Las sillas son un poco incómodas y agotadoras para sentarse, ¡pero la comida lo compensa!

El personal era muy amable y la comida era buena, ¡buena relación calidad-precio también! Las bebidas también eran agradables y frías, ¡perfectas para el clima! Pero los taburetes son un poco altos y difíciles de sentarse, por lo que no son accesibles para sillas de ruedas, etc., como están en el mercado, ¡pero vale la pena si puedes! El pan era agradable y calentito, aunque la comida es un poco salada, ¡pero recién hecha!

Un sitio especial y riquísimo 🤤. Todas las tapas son de un nivel exquisito. Croquetas (jamón y gambas), ceviche de pulpo, vieiras, tartar de ternera espectaculares. Pero después nos comimos el mejor bocadillo de calamares de nuestra vida. Un acierto. Volveremos!!!

¡La primera vez que comí un sándwich de calamares con un toque de sriracha! ¡También probé las tapas y podría quedarme aquí todo el día! Una joya escondida que debes visitar cuando estés en Inca.

He probado varias veces la comida de este sitio comprando para llevar. La comida es excelente, bocadillos, hamburguesas...eso sí, no es nada barato, un bocadillo mínimo 7€. Lo que no me ha gustado para nada es que no tengan publicados todos los precios, las croquetas por ejemplo 2,50€ la unidad así que si compras una docena haz cuentas al total. Los precios deberían estar en la carta.

Podría haberme sentado aquí todo el día, bebiendo vermut y repitiendo tapas. Probablemente me habría caído del taburete si no hubiera tenido que tomar un avión. Animado, excelente comida, excelentes bebidas, excelente personal. Date un capricho y vete. Sólo asegúrese de no tener ninguna cita a la que acudir.

Buenas tapas y bocadillos servidos por gente que con alguna excepción ( el chico) con poca ganas de servir y mala actitud respecto al cliente no habitual.