Juanitas Tapas en Sant Carles de la Ràpita

Raciones muy escasas pero de buena calidad,muy buenas. El trato no fue de los mejores.

Sitio genial en toda extensión de la palabra.combina el maridaje perfecto de la buena cocina y los buenos vinos .haciendo una fusión con la profesionalidad y clase de sus propietarias Myriam

Una experiencia culinaria excelente. Las tapas, llenas de sabor y creatividad, se acompañan con una carta de vinos muy bien seleccionada. El servicio fue impecable: atentos, profesionales y con muy buen trato. Altamente recomendable.”

Tapas geniales, tienen bastantes opciones veganas (recomiendo la ensalada con sal de maíz, que buena....) y tienen opciones muy originales. Hemos repetido varias veces y nos hemos sentido bienvenidos y bien servidos siendo veganos. Gracias!

Unas tapas exquisitas con una fusión de sabores dignas de un primer chef, las dos señoras, una de tapas y otra de sumiller un trato familiar y muy agradable.

Si quieres grandes porciones de platos locales bien cocinados a precios razonables, hay muchos lugares en La Rapita a los que puedes ir y disfrutar de tu comida. Si quieres platos pensados creados por alguien que ama su oficio, que ofrece combinaciones embriagantes de grandes ingredientes a precios razonables, entonces ven aquí. Realmente no esperábamos encontrar sabores tan maravillosos como los que experimentamos aquí, realmente fue todo un placer. Los mismos ingredientes que los demás lugares de La Rapita pero tratados de una manera totalmente diferente con la intención de ofrecer a sus comensales calidad, valor y una experiencia diferente. Puedes degustar cuando los platos se investigan, crean y preparan con orgullo y amor, mejorando los maravillosos ingredientes básicos de maneras originales usando imaginación y combinaciones no estándar. Todo sabía muy bien y sin el alboroto presumido y el teatro escandaloso que puede experimentar en otras cocinas que proporcionan este nivel de cocina. Los precios no eran irrazonables y si bien esta no fue sin duda la comida más cara que tuvimos en La Rapita fue la mejor relación calidad-precio y más agradable en todos los aspectos. Este restaurante es pequeño con solo unas pocas mesas (hay una terraza al aire libre que obviamente no está abierta en febrero) y es la habilidad del chef que hace que la comida aquí sea tan maravillosa que sospecho que sería difícil de producir en grandes cantidades. Me gustaría volver y recomendaría que si realmente aprecias los platos de gran sabor no te decepcionará con la comida aquí. Si este restaurante estuviera en una ciudad principal podrían cobrar al menos el doble de lo que cobran aquí y aún así estaría lleno todas las noches con una lista de espera.