Hotel Posada del Lucero | Monumento Nacional en Sevilla

Tuve una estancia maravillosa en este hotel con mi hijo, aunque solo fue una noche. Desde nuestra llegada, el personal fue encantador: amable, servicial y muy atento. Apreciamos mucho la pequeña piscina; aunque no es muy grande, era perfecta para refrescarse y relajarse después de un día caluroso. Nuestra habitación era comodísima y la cama, perfecta; ambos dormimos de maravilla. A pesar de estar en una ubicación céntrica, el hotel era increíblemente tranquilo, lo que nos permitió descansar plácidamente. El desayuno fue realmente excepcional, con una gran variedad de opciones, incluyendo deliciosos embutidos españoles, ¡una delicia! Y, por si fuera poco, el desayuno era gratuito para mi hijo, lo cual fue una grata sorpresa. El personal superó todas las expectativas: cuando pedí un taxi a la estación de tren, ¡llegó en menos de tres minutos! Sin duda, volveremos a este hotel en nuestro próximo viaje a Sevilla. ¡Muy recomendable!

El mejor hotel que hemos tenido hasta ahora en Sevilla. ¡Todo es genial! Las piscinas son tranquilas y sin mucha gente, los lugares son limpios y muy bonitos, el personal es muy servicial (gracias a Flora). La habitación era estupenda, todo por una buena relación calidad-precio. ¡Lo recomiendo 100%!

El personal fue increíblemente servicial. Nos dieron un mapa práctico al registrarnos y nos informó amablemente sobre lugares para visitar y actividades. ¡Fueron muy serviciales! El personal fue increíble. ¡La habitación era genial! Nos dejaron fruta de cortesía, lo cual fue muy inesperado, pero sin duda genial. Todo estuvo fabuloso.

Disfrutamos muchísimo de nuestra estancia de 3 noches en este precioso hotel. El ambiente es muy tranquilo y relajante. La habitación es fresca y cómoda, con un baño espacioso. El desayuno era abundante, con una buena selección y opciones para todos los gustos. La terraza de la azotea nos brindó un respiro después de un día de turismo. No podríamos haber deseado un mejor servicio de recepción y queremos agradecer a Pablo por su excelente atención. Una estancia excelente, gracias.

Hotel maravilloso, convenientemente ubicado en la ciudad, cerca de numerosos lugares de interés y restaurantes. Pablo nos dio excelentes sugerencias de restaurantes, Ana nos recibió con una gran hospitalidad en la azotea y la hospitalidad de Imere en el desayuno de nuestra primera mañana fue muy acogedora. Personal amable y muy atento. Agradable bar en la azotea con una pequeña piscina para refrescarse después de un caluroso día de turismo. Habitación, baño y cama cómodos y de tamaño generoso. El desayuno estuvo delicioso, con muchas opciones para todos los gustos y recomendaciones de restaurantes acertadas a poca distancia.

Una estancia encantadora. El hotel está bien ubicado para ir andando a las atracciones: el Palacio de Las Dueñas a 5 minutos, el Real Alcázar y la catedral a 15 minutos y la estación de tren a 20 minutos. El personal es amable y acogedor. La habitación estaba limpia y ordenada, y se agradeció el aire acondicionado y la nevera. La terraza en la azotea es perfecta para pasar una tarde soleada o tomar algo por la noche.

Hotel estupendo en una ubicación céntrica. Habitaciones amplias y agradables, un patio relajante para disfrutar de un café, piscina y bar en la azotea, y un personal muy profesional. Me alojaría aquí de nuevo si visitara Sevilla.

¡Un hotel espectacular! Todo era perfecto… habitaciones, ubicación, azotea… La botella de vino espumoso de cortesía que nos dejaron en la habitación fue muy de agradecer… Pero, sobre todo, la amabilidad y alegría de Patricia, la recepcionista, que hizo todo lo posible para que nos sintiéramos a gusto y bienvenidos! ¡Gracias por todo! ¡Muy recomendable!

Pasamos una estancia de tres noches absolutamente increíble en el Hotel Posada a finales de abril. No tengo palabras para describir lo bueno que es este hotel. El edificio es precioso por dentro, con un precioso patio, detalles en madera y un ambiente tranquilo. Nuestra habitación era preciosa y tenía todo lo necesario: cama y almohadas cómodas, amplio armario/almacenaje, nevera y un baño grande (¡con una ducha genial!). La ubicación era perfecta para explorar toda Sevilla: a 10-15 minutos a pie de la Catedral/Castillo, a 5 minutos de las Setas y rodeado de innumerables restaurantes, bares y las hermosas y sinuosas calles de Sevilla. La piscina/bar de la azotea tenía un ambiente encantador y a mi marido y a mí nos encantó pasar la noche allí, jugando a las cartas y tomando una botella de vino. También debo destacar al maravilloso personal: nos alojamos aquí durante el apagón en España, y el personal de la Posada no podría haber sido más servicial y tranquilo en una situación tan confusa. Nuestra estancia aquí fue una experiencia excepcional durante nuestros viajes y, sin duda, volveremos a visitar esta mágica ciudad.

Todo perfecto,,limpio y acogedor,muy buen desayuno