Hotel Dona Pakyta en Níjar

Almorzamos en la terraza y las vistas y la tranquilidad son un lujo. En cuanto a la atención podría mejorar, pedimos simplemente un salmorejo de entrante y un arroz para dos, y llegó antes el arroz que el salmorejo, no habia mucha predisposición por parte del personal, vinos mesas vacías que no se llenaron con ninguna reserva pero a la gente que venía pidiendo mesa les decían que no había nada. En cuanto a los precios bastante desproporcionados para lo que ofrecen.

La comida de sabor no estaba mal pero el servicio fatal comimos en el salón solo había una camarera y no estaba casi pendiente comimos los segundos sin retirar los primeros con cubiertos de pescado durante toda la comida,pedimos chuletas deshuesadas de la carta y adjunto la foto para que veáis que buen hueso tenían.la ensalada de tomate con anchoas sin anchoas y todo a un precio medio alto.para ese servicio no merece la pena no se si será mejor en la Terraza pero en temporada alta agosto una solo persona y sin estar pendiente de las mesas no lo veo.

La comida, muy buena y de cantidad bien. El servicio de los camareros, muy atentos y muy majos. El local, con las vistas al mar.... espectacular!! Fuimos con reserva en la terraza, se estaba de lujo.

Excelente, el jefe de sala no puede ser mas atento, gran producto, trato excelente al cliente, si estas en San Jose no te pierdas ni su arroz caldoso ni su cordero.SENSACIONAL

El lugar es muy bonito. No obstante, el personal nos lió cuando llegamos. Teníamos una reserva hecha y no supieron decirnos dónde la teníamos. No nos acompañaron ni nada, subiendo los escalones de la muerte 3 o 4 veces. Cuando por fin nos sentamos en la terraza (ese camarero fue muy apañado, solo ese), nos dijeron que iban a preparar el pan sin gluten porque uno de los comensales padece una alergia al gluten. Nos dijeron que llegaría con los entrantes. Cansados de esperar, le preguntamos y resulta que no había pan sin gluten. No nos lo dijeron hasta ese mismo momento. Podríamos estar esperando el pan todavía. La comunicación entre los camareros, bastante regular. En cuanto a la comida, había platos muy muy ricos, como las volandeiras o el revuelto de patatas con gamas y huevo; no obstante, también nos pusieron comida sin fuste, como el arroz o el calamar. Considero que por ese precio, el arroz no debería ser tan mediocre. Nos clavaron 3€ por cafés con leche, cortados o solos, y por cada postre, 8 euros, sin ser excesivamente grandes... Demasiado caro para lo que comimos. Volveremos a San José y no vamos a repetir en el restaurante, desde luego.

Sitio fantástico para comer frente al mar. Pedimos una paella de arroz y marisco qué estuvo bastante buena. El servicio fue bastante pobre, los cafés llegaron derramados, el pan ya cuándo nos habíamos terminado la ensalada... El precio estuvo por encima de la calidad. Ojo con los precios que van fuera de carta como la bebida y el café (cañas a 4€ y cafés a 3€) qué hacen que se dispare la cuenta

Fuimos a comer porque era el único sitio que tenía hueco. Pedimos arroz negro, bien sin más, no es gran cosa, ni en cantidad ni en sabor. De precio elevado (24€ persona el arroz negro), pagas el sitio más que el arroz. La bebida igual, 4.50€ la copa de vino y 4€ cerveza ... Eso sí, el servicio y trato es excepcional. Si quieres vistas y pagarlas, bien, si no... No repetiría.

Desde el primer día que pisé Doña Pakyta, me enamoré del lugar. Las vistas son espectaculares, el mar pegado, las casitas blancas de San José, la limpieza del lugar, todo acompaña. Después descubrimos lo fácil que te lo hacen todo las personas que allí trabajan. Desde el primero al último hicieron que nuestra boda fuese cómoda, divertida y en un ambiente mágico. Muy recomendable. Al 100 x 100. Regresaremos como huéspedes del hotel cuando queramos unos días de desconexión.

Muy bueno todo. Nos atendieron sin reserva y comimos muy bien.

Estuvimos comiendo el pasado fin de semana y la verdad que estuvo mejor de lo esperado. Lo que pedimos estuvo muy bueno y el ambiente inmejorable, comiendo al lado de la playa en un enclave único. Lo que si nos pareció que era muy mejorable fue el servicio, que a pesar de que no fue malo no lo que esperábamos. Recomendamos mucho que se coma en la terraza.