Hotel Atolon en Son Servera

Hotel muy fácil de llegar, con una ubicación excelente, en el paseo marítimo peatonal y cerca de hermosas playas, restaurantes y bares. Las habitaciones y la limpieza de todo el hotel son siempre perfectas. Comida fantástica. Mi pareja y yo contratamos media pensión y nunca habíamos elegido mejor. Todo el personal del hotel es muy amable y servicial.

Todo es super 🤩🌟en el sentido literal de la palabra Habitaciones bonitas y limpias con limpieza diaria. Comidas - Asegúrate de tomar el desayuno y la cena, no te arrepentirás ni un minuto. Excelente ubicación, cerca de tiendas, paseo marítimo para caminar, playa de arena y estacionamiento gratuito 🅿️ Hay una bonita piscina con una linda vista, también hay un bar con música en vivo. Puedo recomendar este lugar con confianza a todo el mundo, ¡sin duda volveré allí! )

Hermosa vista desde la terraza. Pero siempre presta atención a la factura de la comida y la bebida ;)

Una estancia maravillosa! Buscábamos calma y desconectar y elegimos el sitio ideal!! Huyendo de las masificaciones. El buffet de 10, mucha variedad con una calidad increíble. El personal súper amable y atento. Las habitaciones muy cómodas. Volveremos!!!!

Súper amable, siempre feliz de volver.

La ubicación del hotel principal y la vista desde la piscina son increíbles. La selección de comida fue decepcionante. La primera noche, mi pareja pidió brochetas de pollo crudas; las devolvió y pidió nuevas; llegaron crudas también. La segunda noche, pudimos elegir entre cerdo o cordero, que ninguno comimos, y nos decepcionó la noche anterior, así que cenamos fuera. Cenamos fuera tres de las cinco noches que estuvimos allí (uno de ellos por una boda, así que no tuvimos que comer en el hotel). Habíamos reservado una habitación con balcón, pero al registrarnos nos decepcionó porque no teníamos balcón, sino terraza compartida. Al preguntar en recepción, nos dijeron que no había otras habitaciones disponibles, así que tuvimos que quedarnos con ella. También habíamos reservado una habitación con cama doble (dos individuales juntas). Al preguntar, nos dijeron que podían proporcionar un cubrecolchón para convertirla en cama doble. Al reservar el hotel, no sabía que había un edificio separado con otras habitaciones, así que me decepcionó al registrarme y que me dijeran que nuestra habitación estaba enfrente del hotel principal. No había entretenimiento por la noche, lo cual fue decepcionante.

Decir que hemos estado muy a gusto con las instalaciones, el personal, la limpieza, cumplió con creces nuestras expectativas. El personal se nota que está contenta trabajando en buena sintonía entre ellos. Hacen que se transmita a la gente que se hospeda allí. Recepcionistas, las señoras de limpieza, cocineros, camareros y todo eso es culpa de una dirección que está pendiente en todo y ayudan en cualquier consulta o contratiempo que nos pueda ocurrir. La instalaciones son tal y como se ven en las fotos. Estas en las hamacas mirando al Mar y la playa de arena fina y aguas cristalinas está a 50 metros, Cala Millor. ¡Es una pasada! La comida no es un buffet como en las grandes cadenas. Es más selecto, tienes una parte de buffet y otra zona donde te hacen la comida a la plancha, no se te hace monótona. No podía terminar sin mencionando a los cocineros y en especial Antonio, de Jerez de la Frontera, gracias por el trato, el cariño y el cuidado que nos diste desde el primer momento a mi mujer y a mi, en la semana que estuvimos. También a Mayte por llevar el hotel y coordinar a la gente que tiene a su cargo, que trabajen con dedicación y buen trato hacia el cliente. Está en mi lista de hoteles top. Es totalmente recomendable. Seguro que volveremos. Enhorabuena.

Masterchef en la cocina, pero dúchate bajo tu propio riesgo 😄 El Hotel Atolon tiene un ambiente agradable e íntimo: es un hotel pequeño dividido en dos edificios. El restaurante es más pequeño y la selección de platos no es muy extensa, pero es suficiente. La calidad de la comida nos sorprendió absolutamente: desayuno y cena como de un maestro cocinero, con cocina en vivo de varios platos en el lugar (pero solo puedes comunicarte en español 😄), complementado con buffets, frutas y dulces. La vista desde el restaurante y la piscina es muy bonita, pero desde las habitaciones no es nada a menos que pagues por una vista al mar. Las habitaciones ya eran más débiles: paredes y muebles blancos, sin adornos ni cuadros, un poco como una habitación de hospital. El baño era muy pequeño y aunque no estaba sucio, tenía sus problemas: los desechos de la ducha no drenaban, la temperatura del agua fluctuaba constantemente (agua hirviendo cada 30 segundos) y el ventilador no funcionaba correctamente. Había falta de suministros de higiene (hisopos de algodón, bastoncillos). El televisor es antiguo, no tiene funciones inteligentes y la radio no funciona muy bien. Y aquella supuestamente era una habitación "mejor". Todo en el hotel era muy ruidoso, las puertas de las habitaciones se cerraban tan fuerte que se podían oír los golpes todo el tiempo. Lo más extraño era la ropa de cama, dividida en tres partes: una sábana, un edredón SIN sábana y una colcha. Te cubres con capas sueltas que no se sostienen juntas 😄. Una solución muy extraña, pero los colchones eran de alta calidad y cómodos, dormimos bien. La ubicación está en las afueras de Cala Millor, a unos 10 minutos a pie del centro y de la playa. No hay aparcamiento; a veces se puede aparcar en las calles de los alrededores, pero a menudo tuvimos que ir a un estacionamiento público más alejado (también a unos 10 minutos a pie). El hotel ha sido renovado, pero en un estilo más económico. No había agua potable gratuita en el hotel.

Llevamos una semana alojados en este hotel... todo es perfecto. El personal es atento, la habitación impecable, la ubicación con vista al mar ideal y para terminar, comidas muy variadas y de buena calidad. Te lo recomiendo no te decepcionarás ☺️

Un buen hotel en general, pero no merece un 4*. Puntos positivos: - comida gourmet; -La piscina con vistas al mar es una auténtica ventaja. Puntos negativos: -la mayoría de las habitaciones (excepto las que tienen vistas al mar) están en el edificio anexo que da a la calle y eso arruina todo el encanto -Las habitaciones son demasiado básicas, no dignas de un hotel de 4*. -Insonorización ausente.