Hostel Complutum en Alcalá de Henares

Habitación limpia, camas literas perfectas . Puerta del baño requiere solución.Por lo demás muy bien todo.

Fuimos a cenar mi pareja y yo anoche y nos encantó, la comida buenísima, pedimos unas flores de alcachofas y una hamburguesa ibérica, las alcachofas con una combinación de sabores increíble, las recomiendo totalmente y la hamburguesa…madre mía la hamburguesa 😍 a parte que el servicio excelente! Por parte de todos, pero sobre todo Isaac que fue quien nos atendió y asesoró, muy cercano, amable y profesional, nos fuimos muy contentos, repetimos seguro!

las habitaciones por lo menos la nuestra muy justa de espacio limpia cama confortable baño enorme preparado para minusvalido no era nuestro caso y por lo tanto la calefación no llegaba al baño y fue imposible ducharnos .Eso si el sitio inmejorable cerca de todo no es lo correcto lo correcto es dentro de todo el casco antiguo .Lo que nos parecío raro era ir por las mañanas al hotel de al lado a desayunar no sabemos aun porque las habitaciones que nos dieron no estaban dentro del hotel donde desayunabámos nada mas que añadir.

Ha sido todo un descubrimiento. Un hotel sencillo pero con todo. Las habitaciones amplias y cómodas. Los dibujos de Carlos Chacón, un total acierto, me pareció muy original. El baño limpio. Las mesitas de noche no tanto. El resto de la habitación también limpia, aunque el servicio de limpieza muy ruidoso y poco organizado. Es verdad que el registro y la salida ha de hacerse en el Hotel Bedel. No me resultó molesto, pero es extraño. Se nota que es otro tipo de alojamiento. Había concierto, pero no sé oía nada en las habitaciones y a las 11,30 se terminó. Los camareros y el encargado muy atentos y amables. El lugar me gustó mucho.

El lugar con mejor ubicación de Alcalá. Agradable de día por su tragaluz. Buena comida y los jueves conciertos en directo.

Estuvimos en el bar por lo que puntuo las habitaciones para que no salga maña nota

Un lugar con unas vistas especiales hacia la Universidad, que los jueves se transforma en uno de los lugares con más encanto de las noches alcalaínas. Sus conciertos con el sello inconfundible de Ricardo Segura convierten al Hostel en una cita ineludible para las noches de los jueves. El trato de todos sus camareros es fantástico, en especialmente de Isaac, que hacen que te sientas como en casa. Si los jueves salís...no podéis faltar!

Aunque llegamos y la impresión fue poco grata, debido a que estaba a tope de chavales borrachos y desmadrando, en menos de una hora desaparecieron y todo estuvo en paz y quietud. La habitación correcta y limpia, aunque había un olor desagradable del baño (cañería o bote sifónico) que apestaba…

Solo fuimos a cenar a la cafetería, excelente relación calidad precio

La ubicación perfecta, la habitación muy bonita pero hacia más frío que en la comunión de pingu ni poniendo la calefacción se calentaba eso.