Hostal Mallorquines en Riudarenes

Menús de muy buena calidad, servicio muy amable

Comida casera tradicional, sencilla y a un precio más que razonable. Buen servicio, amable y rápido.

He ido para comer varias veces, este viernes pasado llevé a 4 personas para cenar y quedamos todos encantados, no decepcionan. El camarero se llevó genial, joven, educado, atento y risueño.

Llevo toda la vida yendo al restaurante, de hecho íbamos allí porque había un familiar difícil de tratar y como ya lo conocían, lo trataban de maravilla. Me acordaré toda la vida de la paciencia y el cariño con que nos atendían. Todas las celebraciones familiares las hacíamos allí, y ahora seguimos yendo. Entre semana hacen diferentes menús a diferentes precios para todos los públicos. La atención es excelente, no tengo ninguna queja.

Es un sitio ideal para comer o para desayunar. Raciones abundantes, a precios muy razonables, servidos por personal extraordinariamente competente y atento. Merece una parada.

Muy buen restaurante, las habitaciones no sé, no las utilicé.

Desde que lo descubrimos es uno de nuestros preferidos cuando pasamos por allí. No dudes, entrar y disfrutar de lo gustosa que está la comida. Muchas gracias.

Hostal encantador, personal muy atento y amable, bien comunicado y se come muy bien.

Solo fuimos al restaurante a cenar. Después de quedar tan impresionados el año pasado, queríamos volver este año. La comida sigue siendo muy buena, y esta vez tampoco nos decepcionó. ¡Felicitaciones a los chefs! Se merecen 5 estrellas. Lamentablemente, el servicio nos decepcionó mucho. La última vez, un camarero muy joven nos aconsejó y nos atendió con mucha competencia; quedamos impresionados y nos sentimos cómodos. Esta vez, fue como si nos sacaran del menú a toda prisa. Sin sonrisas, los platos llegaron uno tras otro sin pedirlos, así que sentimos que intentaban sacarnos lo antes posible. Luego pedimos un pequeño descanso durante el postre, lo cual pareció ser recibido con cierta molestia. Volví a darme cuenta de lo importante que es el servicio. Es una pena, pero la próxima vez iremos a otro sitio.

El Hostal de Mallorquines, sigue siendo el sitio ideal para comer o para tomar un "desayuno de tenedor" que nos haga innecesario el almuerzo. Raciones abundantes, a precios muy razonables, servidos por personal extraordinariamente competente y atento. Merece una parada y también un desvío de la ruta (o un viaje express).