Horno San Roque en Sevilla

Pan de toda la vida, bueno pero sin pijeríos. Miga esponjosa, corteza crujiente. Te dura varios días sin problema. Y vaya molletes... Ah, y abre temprano, como las panaderías de antes, que ahora parecen boutiques...

Desde que descubrí Horno San Roque, me he convertido en un cliente habitual. Esta panadería, ubicada en el corazón de Sevilla, es un verdadero tesoro que me transporta a tiempos pasados. Rafael, el actual panadero, es un apasionado de su oficio y se nota en cada bocado. Cada mañana, el aroma del pan recién horneado me recibe con los brazos abiertos. La variedad de productos que ofrecen es impresionante, pero lo que realmente me enamora son sus panes tradicionales. La corteza crujiente y el interior esponjoso son simplemente irresistibles. Además, Rafael siempre está dispuesto a compartir su conocimiento sobre el proceso de elaboración, lo que hace que cada visita sea aún más especial. Lo que más valoro de Horno San Roque es su compromiso con la tradición. En un mundo donde las panaderías industriales parecen dominar, este lugar se mantiene fiel a las recetas y técnicas que han pasado de generación en generación. Cada vez que compro un pan, siento que estoy apoyando una parte de la cultura sevillana. Si buscas un lugar donde disfrutar de un buen pan y conocer a alguien que realmente ama lo que hace, no puedo recomendar Horno San Roque lo suficiente. ¡Definitivamente vale la pena la visita!