Guayaba beach en Marbella

El mejor espetero de San Pedro, se come muy bien y la relación precio calidad increíble

Chiringuito tranquilo, con un ambiente relajado y muchos lugareños vienen a almorzar. Todos los camareros fueron muy amables y acogedores. Disfrutamos de sus sardinas y pulpos a la parrilla, así como de las ensaladas, gambas y mejillones, todo sabía muy bien y los precios son muy razonables.

Super ambiente y comida muy, muy sabrosa. Pedí un filete de cerdo y un mojito, la comida era tan buena que fui a este restaurante a desayunar, almorzar y cenar durante mis vacaciones. Un restaurante increíblemente maravilloso. Todo es sencillo y delicioso. Recomiendo 🔥🔥🔥

Se come genial y los camareros intentan estar rapidos eficaces y atentos.

El Restaurante La Guayaba ofrece una experiencia encantadora a pie de playa, combinando una atmósfera cálida con vistas espectaculares del mar. La ubicación es ideal para disfrutar de una comida relajada mientras se escucha el sonido de las olas, lo que lo convierte en un lugar perfecto tanto para parejas como para familias. En cuanto a la comida, el menú ofrece una buena variedad de platos a precios razonables, destacando por su frescura y sabor. Los mariscos y pescados son particularmente recomendables, preparados con ingredientes locales y presentados con un toque creativo. El servicio es amable y atento, asegurando que los comensales se sientan bien atendidos en todo momento. Sin embargo, el único punto en contra es la falta de opciones para terminar la comida con un buen café. Después de disfrutar de una comida deliciosa, es una pena no poder complementar la experiencia con una taza de café. A pesar de esto, el restaurante sigue siendo una excelente opción para quienes buscan una comida de calidad en un entorno espectacular.

Muy contentos con el chiringuito, nunca falla. Muy buenos espetos, raciones de paella, fritura malagueña… Tanto de día como de noche ambiente agradable

Chiringita increíblemente atmosférica. Personal agradable, comida. Los precios son un poco altos.

Buena ubicación, mal servicio, comida normal.

Servicio a tope pero pudimos cenar claro es agosto

Voy todos los veranos con familia y amigos. Es cierto que la comida no es la mejor del mundo, pero hay buena relación precio-calidad. Realmente es un chiringuito a pie de playa, no un restaurante de estrella Michelin, (ojo con el calzado, por cierto). El personal es muy amable, aunque eso de que solo algunos recojan platos y otros solo tomen nota o traigan la comida es un poco complicado, aunque entiendo que eso no es culpa del empleado sino de su supervisor. En resumen, recomiendo ir; pero no con la expectativa de un restaurante lujoso, sino con la de un bar con buen ambiente. No esperen copas brillantes y servilletas de tela blanca, sino personal con una sonrisa.