Guachinche La Finca en La Victoria de Acentejo

Más auténtico no puede ser, muy agradable el sitio y el servicio, pedimos demasiada comida porque los platos son exagerados pero estaba todo muy bueno a un precio muy económico.

Muy bueno todo. Un poco despistado el servicio por momentos aunque muy atentos y amables.

Hacia tiempo que no me comía una carne tan gustosa, servicio buenísimo y gente natural como uno espera , amabilidad 100%

Siempre hay mucha gente, por algo será. Pero encuentran sitio enseguida y no tardan en servirte. Hasta ahora siempre he comido muy bien. Esta vez fue solomillo de cerdo y estaba buenísimo. Y el conejo como en muy pocos sitios. Está lejito pero vale la pena.

Se encuentra en medio de un hermoso paisaje rural, rodeado de viñedos. La terraza ofrece vistas impresionantes y es el lugar perfecto para disfrutar de una comida al aire libre. El ambiente es acogedor y familiar, ideal para grupos familiares y amigos. El menú destaca por sus platos tradicionales. La carne a la brasa es especialmente popular y se sirve con diferentes sabores de guarniciones, destacando los champiñones. El personal es muy amable y atento, ofreciendo un excelente servicio. La atención es rápida y el personal está siempre dispuesto a ayudar. La relación calidad/precio es excelente, con precios razonables para la calidad de los productos. Las raciones pueden ser bastante generosas, por lo que es recomendable pedir medias raciones. Guachinche La Finca es un lugar ideal para disfrutar de la gastronomía canaria en un entorno natural y acogedor Su excelente relación calidad/precio y el ambiente familiar hacen que sea una opción recomendable para cualquier visita a La Victoria.

Guachinche con mucha variedad de platos.Todo riquísimo y a buen precio.

Rústico. Porciones grandes, pide siempre una para dos. Mucha carne, pero sabrosa. La sopa de garbanzos y la ensalada también estaban deliciosas. ¡Y no dejes de probar el Omanachtich!

Se come muy bien,todo buenísimo,muy atento los camareros

Atendimiento rápido y calidad-precio muy bien.

Fuimos recomendados por gente de allí. Nos encantó. Era como estar en el patio de una casa y comer muy bien por un precio de risa. Lugares así hay que conservarlos