16/07/2025: Excelente acústica y acogedor, muy recomendable. Me encantó
13/07/2025: El Auditorio de Tenerife "Adán Martín", obra icónica del arquitecto Santiago Calatrava, es una caja de sorpresas arquitectónicas y secretos. Más allá de su evidente semejanza con una ola o un velero, aquí tienes algunos de sus detalles más curiosos:
* Una Ceja sin Apoyo: La espectacular sobrecubierta o "ala" que define su silueta es una de las proezas de ingeniería más asombrosas. Mide unos 100 metros de longitud y su extremo, que parece flotar desafiando la gravedad a 50 metros de altura, está completamente libre, sin ningún tipo de apoyo. Toda la estructura, con un peso de 3.500 toneladas, se sustenta en tan solo dos puntos en la base.
* Piel de Mosaico Roto: Su brillante piel blanca no es pintura. Está recubierto por la técnica del "trencadís", un mosaico creado a partir de fragmentos irregulares de azulejo blanco. Este método, popularizado por Gaudí, le confiere su textura y luminosidad características. Sin embargo, ha sido una fuente de problemas, con desprendimientos que han requerido importantes y costosas reparaciones.
* Acústica a la Carta: El interior de la Sala Sinfónica es tan impresionante como el exterior. Para lograr una sonoridad perfecta para cada tipo de espectáculo, ya sea una ópera, un concierto sinfónico o una actuación de jazz, el techo está cubierto por más de 50 paneles de madera y metal. Estos paneles pueden moverse y ajustarse para cambiar el volumen y la reverberación de la sala, adaptando la acústica a las necesidades específicas del evento.
* Un Órgano Único en el Mundo: El órgano de la sala principal, con sus 3.835 tubos, no es un instrumento convencional. Fue diseñado por el maestro organero Albert Blancafort y su disposición, emergiendo a ambos lados del patio de butacas, lo convierte en una pieza única por su concepción sonora y visual, creando un efecto envolvente para el público.
* La "Sídney del Atlántico": La semejanza de su perfil con la famosa Ópera de Sídney es innegable. Esta similitud ha llevado a que la ciudad de Santa Cruz de Tenerife sea apodada en ocasiones como "La Sídney del Atlántico". Además, el expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, lo visitó en 2005, quedando maravillado por su singularidad y refiriéndose a él como "la catedral del futuro".