Grosso Napoletano - Viapol en Sevilla

Jesús fue gran tipo, y nos atendió de manera espectacular, su recomendaciones de los vinos magnífica.

Jesús y Tamara nos han hecho pasar una velada fantástica, el restaurante es precioso, con un ambiente muy acogedor y ellos nos han atendido estupendamente! Volveremos a seguir probando postres ricos

Comer pizza napolitana en el extranjero siempre es una incógnita, pero como Grosso Napolitano, comí pizza como en Nápoles porque el pizzero, Armando, es napolitano y nos deleitó con su arte. Saludos también a todo el personal. Gracias por todo.

Excelente experiencia, deliciosa pizza napolitana preparada con buenos ingredientes por Armando, quien nos impresionó muchísimo, ya que es un auténtico napolitano. Gracias también a todo el personal; volveremos.

Pizzería verdaderamente napolitana, personal excelente y chef de pizza napolitana llamado Armando, muy bueno preparando pizzas y junto a sus compañeros haciendonos sentir tratados de manera excelente.

Grosso Napoletano es un gran lugar para comer pizza napolitana en Sevilla, teniendo como pizzero a Armando, un verdadero napolitano, quien nos preparó una excelente pizza, junto con todo el personal, nos hicieron sentir como si estuviéramos en NÁPOLES.

Sitio agradable con buen ambiente. Muy buena la pizza y la lassaña

Muy buena experiencia, desde el ambiente, el servicio y la comida. Productos de calidad y precios razonables. Recomiendo la pizza carbonara. Sin duda dentro de mi top 5 de italianos de Sevilla.

La comida buenísima y buen servicio. Sin embargo la ausencia de aire acondicionado quitó calidad a la experiencia. Al preguntar nos dijeron que el AA estaba averiado y sin intención de arreglarlo. Una pena pues es necesario con las altas temperaturas de Sevilla.

Estuvimos el año pasado en el local que tienen en la Alameda de Hércules, especializado en platos sin gluten, y salimos muy satisfechos, pero queríamos visitar este local más “convencional”, algo alejado del centro histórico, en el barrio de San Bernardo. La carta es muy simple: 6 entrantes y 16 pizzas, nada de pasta, además de postres y bebidas. Nosotros optamos por pizza la vera carbonara y pizza prosciutto e funghi. Con una copa de Lambrusco tinto, una botella de agua y postres de albero da zia Lucy (crema de nata semihelada y polvo de galleta) y limoncello spritz, la cuenta fue de 45,90 € para dos personas. Nos encantó, el local muy bonito, muy buena atención, y la comida, fantástica, especialmente la vera carbonara, que estaba increíble. En cuanto volvamos a Sevilla lo visitaremos de nuevo.