Foster’s Hollywood - Parque Warner en San Martín de la Vega

La comida está riquísima el servicio te atendía muy rápido y amables el ambiente parecía estar en un museo en mi opinión.

La comida está buena y es cierto que nos pasaron antes por ser dos, pero, esperamos unos 30/40 minutos aprox a por la comida y cuando llegó estaba hasta un poco fría; me esperaba otro trato por parte de este restaurante.

Estuvimos comiendo aquí durante nuestra estancia en el parque y los precios eran igual que en la calle y el personal muy amable, en concreto Marina.

Fuimos mi familia y yo, dos adultos y dos niños de 4 y 7 años, en principio, un poco reticentes por la cantidad de opiniones negativas que había leído pero fuimos un día en que ésta y otras de menú express de hamburguesa o similar, patatas y bebida por 13 ó 14 euros eran las únicas opciones, y por la diferencia de precio y la diferencia en la calidad de la comida y el tipo de restaurante decidimos arriesgarmos. Para los peques pedimos un sólo menú de niños porque uno de ellos estaba un poco regular de la barriga y, en principio, no le apetecía tomar nada, que incluía un plato, la bebida y el postre. Pedimos el de pasta en el que te viene un plato de pasta con tomate, salchichas y, aparte, un filete de pollo rebozado bastante grande, por lo que vienen a ser como un primero y un segundo. Al final comieron los dos y les sobró comida. Mi marido y yo pedimos una hamburguesa cada uno con guarnición de patatas, todo ello muy bien cocinado y delicooso, así que en cuanto a la calidad de la comida tengo que decir que no encontré ninguna diferencia entre este Foster's y los de la calle. El personal, la verdad es que genial, muy amables y atentos, sobre todo con los niños. A pesar de que sólo les pedimos un menú, tuvieron detalles con los dos, lo cual no suele ser lo habitual. Ya se sabe, tanto pagas, tanto vales... lo cual en el caso de los niños es algo que me da bastante rabia sobre todo cuando no consumen por razones evidentes, como que son demasiado pequeños o no pueden comer, por la razón que sea. De precio, normal tirando a alto, aunque si lo comparamos con el menú express con comida mini con el que te quedas con más hambre que cuando empiezas el Foster's le gana por goleada teniendo en cuenta que mi marido come bastante y salió hinchado. Lo único que sí me parece un poco desmedido es el tema de la bebida, aunque sea rellenable, porque para las personas como yo, que no solemos repetir, o mi hijo pequeño al que le pedimos un aquarius y le dió dos sorbos, 4'5 euros me parece un poco excesivo. En definitiva, con las expectativas con las que íbamos, que salieramos tan contentos tuvo mucho mérito, así que animo a todas esas personas que van en temporada alta o en días de mucha afluencia a tener un poco de empatía con la gente que está ahí para servirnos, a pesar de que se les pague para eso, que a veces se ven desbordados de trabajo (y no precisamente porque ellos lo elijan) y a las que tan difícil se lo ponemos a menudo, a no criticar de manera tan gratuita, ponerse un poco de su parte y a felicitarlos cuando se lo merecen, como fue nuestro caso. Puede que haya quien piense que tengo alguna relación especial con el restaurante, pero nada más allá. Sólo pensé, según nuestra propia experiencia que la gente, además de críticas negativas también merece ser felicitada cuando hace bien las cosas, quizás eso les anime más a seguir mejorando. Así que, en mi nombre, y en el de mi familia, os deseo que tengáis la suerte de encontraros con más gente agradecida y menos exigente. Por nuestra parte, gracias otra vez.

Fuimos mi familia y yo, dos adultos y dos niños de 4 y 7 años, en principio, un poco reticentes por la cantidad de opiniones negativas que había leído pero fuimos un día en que ésta y otras de menú express de hamburguesa o similar, patatas y bebida por 13 ó 14 euros eran las únicas opciones, y por la diferencia de precio y la diferencia en la calidad de la comida y el tipo de restaurante decidimos arriesgarmos. Para los peques pedimos un sólo menú de niños porque uno de ellos estaba un poco regular de la barriga y, en principio, no le apetecía tomar nada, que incluía un plato, la bebida y el postre. Pedimos el de pasta en el que te viene un plato de pasta con tomate, salchichas y, aparte, un filete de pollo rebozado bastante grande, por lo que vienen a ser como un primero y un segundo. Al final comieron los dos y les sobró comida. Mi marido y yo pedimos una hamburguesa cada uno con guarnición de patatas, todo ello muy bien cocinado y delicooso, así que en cuanto a la calidad de la comida tengo que decir que no encontré ninguna diferencia entre este Foster's y los de la calle. El personal, la verdad es que genial, muy amables y atentos, sobre todo con los niños. A pesar de que sólo les pedimos un menú, tuvieron detalles con los dos, lo cual no suele ser lo habitual. Ya se sabe, tanto pagas, tanto vales... lo cual en el caso de los niños es algo que me da bastante rabia sobre todo cuando no consumen por razones evidentes, como que son demasiado pequeños o no pueden comer, por la razón que sea. De precio, normal tirando a alto, aunque si lo comparamos con el menú express con comida mini con el que te quedas con más hambre que cuando empiezas el Foster's le gana por goleada teniendo en cuenta que mi marido come bastante y salió hinchado. Lo único que sí me parece un poco desmedido es el tema de la bebida, aunque sea rellenable, porque para las personas como yo, que no solemos repetir, o mi hijo pequeño al que le pedimos un aquarius y le dió dos sorbos, 4'5 euros me parece un poco excesivo. En definitiva, con las expectativas con las que íbamos, que salieramos tan contentos tuvo mucho mérito, así que animo a todas esas personas que van en temporada alta o en días de mucha afluencia a tener un poco de empatía con la gente que está ahí para servirnos, a pesar de que se les pague para eso, que a veces se ven desbordados de trabajo (y no precisamente porque ellos lo elijan) y a las que tan difícil se lo ponemos a menudo, a no criticar de manera tan gratuita, ponerse un poco de su parte y a felicitarlos cuando se lo merecen, como fue nuestro caso. Puede que haya quien piense que tengo alguna relación especial con el restaurante, pero nada más allá. Sólo pensé, según nuestra propia experiencia que la gente, además de críticas negativas también merece ser felicitada cuando hace bien las cosas, quizás eso les anime más a seguir mejorando. Así que, en mi nombre, y en el de mi familia, os deseo que tengáis la suerte de encontraros con más gente agradecida y menos exigente. Por nuestra parte, gracias otra vez.

Todo lo que hemos comido estaba buenísimo. Ademas con el bono tienes un descuento así que fantástico , volveremos.

Para ser un restaurante de renombre, la comida nos pareció de una calidad media-baja. No repetiremos

Personal muy amable y con exquisita paciencia. Aunque suelen tener mucha gente, la atencion es rapida. Fernando muy atento con los niños .

Hemos estado muy agusto. Nos atendio Joyce, super amable y atenta. Destacar tambien la actitud de otro camarero, Emilio.

Nos atendió Joyce y fue muy amable. Todo genial.