Fonda cal blasi en Montblanc

Hostal muy acogedor con personal muy cercano que hacen lo posible por hacerte sentirse como en casa. Desayuno variado con fruta, embutido, zumo y pastel. Habitaciones con paredes de piedra acogedoras algunas con ducha otras con bañera. Sin ascensor. Sala de estar amplia con muchos juegos de mesa. Fuimos con bici y las pudimos dejar en la zona de los bajos con capacidad para 1 coche. Estuvimos muy agusto 😃🥚

El hostal es maravilloso. Tanto las habitaciones como las zonas comunes son muy acogedoras y están muy limpias. El desayuno fue genial, nos encantó todo!! Las chicas que lo llevan son maravillosas y nos hicieron sentir como en casa. Lo recomiendo tanto como para parejas, familias, amigos… Volveré 100%!

Hostal pequeño y acogedor donde el trato es exquisito, la habitación muy bien, un 10. Pudimos ir con la perrita y ningún problema.

Un hostal muy bonito, acogedor y tranquilo. Las dueñas del hostal muy amables. Es un hostal q vale mucho la pena y tiene un muy buen precio. Todo está súper limpio y muy bien decorado, te sientes como en casa. ¡Muy recomendable!

Pequeño gran hotel tradicional, en el centro de la ciudad, desayuno encantador pero, sobre todo, propietario/gerente excepcionalmente amable y acogedor.

Unos días inolvidables en Cal Blasi. Quisimos desconectar y visitar Montblanc. Habíamos leído muy buenas reseñas sobre el hotelito Cal Blasi, pero ver para creer. Situado en pleno centro de Montblanc. Las responsables Raquel y Ana nos recibieron como si fuéramos de la familia y hasta nos dieron "las llaves del castillo". Sus sonrisas, empatía y servicio son de otro planeta. Podíamos disponer de café o té a cualquier hora. Nuestra habitación tenía cama individual en primera planta y cama de matrimonio en planta alta y con terracita. Lo pasamos de lujo. Todo muy limpio, camas cómodas. El baño funcionaba muy bien todo, toallas, ropa de cama, limpieza de habitaciones... Fue como viajar en el tiempo, los detalles vintage maravillosos en las habitaciones. La sala común de ocio y juegos es sencillamente alucinante. El desayuno era súper abundante y tenía en cuenta todos los posibles gustos (bandeja de fruta en trozos pequeños, tostadas, embutidos, aguacate, nutela, mantequilla y mermelada, café, zumo de naranja...). De verdad que son un amor! La ciudad merecía una visita con calma: muralla medieval, legado de los templarios; el nacimiento de la leyenda de Sant Jordi (princesa y dragón incluidos); museos recomendables (Museo Comarcal de la Conca de Barberà, y en especial el Museo del Pesebre de Catalunya), las imponentes montañas de Prades... Toda la experiencia fue buenísima. Volveremos!

Excecional en todos los servicios, todo muy limpio, decoración preciosa,las camas muy cómodas,desayuno exquisito,el trato no ha podido ser mejor

Un hotel con mucho encanto. Muy bonito Y una atención excelente

Personal muy amable y atento. Todo muy limpio y acogedor, además de que el desayuno estaba muy completo. La sala de estar compartido es encantadora y está llena de libros y juegos. A mi familia le ha gustado mucho y le encantaría volver a alojarse aquí en un futuro. Ha sobrepasado nuestras expectativas. Como amantes de los animales, los gatitos que se sientan en la puerta de acceso son la guinda del pastel.

Ambiente familiar y hotel muy familiar, muy acogedor y habitación con salida. Me han estado pocas horas pero muy recomendable. Habitación 13 por suerte.