Estrella del Bajo Carrión en Villoldo

(13-04-2025 14:30) Buen restaurante con una oferta gastronómica de primer nivel. Salón muy amplio, con techos muy altos y con mucha luz natural que se agradece. Servicio muy atento y profesional. Comida para dos: dos pruebas de sopa castellana (detalle de la casa), dos pruebas de alubias blancas de la Vega De Saldaña (muy tiernas), ración de ricos marzuelos y huevo escalfado, ración de perretxicos con yemas de huevo, bacalao ajoarriero (buen taco con punto de sal equilibrado) y una soberbia paletilla de lechazo deshuesada y entreasada. De postre una tarta tatin de manzana reineta muy delicada con un café expresso. Carta de vinos muy buena a precios comedidos dado el local. Tomamos tinto Pícaro del Águila 2022 (42€) servido en copas buenas. Experiencia que repetiremos pues la carta y la cocina lo merecen, aunque las dos raciones de setas fueran bastante ridículas para el precio que cobran. Todo por 197€.

Una experiencia excepcional, un sitio mágico en el que disfrutar de la maravillosa comida, de la tranquilidad en sus espacios comunes y sobretodo, de la magnifica hospitalidad castellana de sus anfitrionas. Solo pasamos una noche y nos sirvió para saber que volveremos al menos una vez al año a partir de ahora. Llevan generaciones cuidando de este sitio único, (mi familia y ya yo lo disfrutamos hace años) esperemos que mantengan la esencia y sigan ofreciendo la misma calidad que hasta ahora. Muchas gracias por todo

Aquí, la experiencia siempre es buena. Ambiente, comida, trato..., todo exquisito y delicioso.

Cuenta con un menú degustación con luces y sombras. Abusan del pimentón en todo el menú, con lo que sí te gusta, triunfas, si no se hace monótono.

Comimos en el restaurante y nuestra experiencia no pudo ser más positiva. Local amplio y con detalles de decoración que ya dejan ver que el cuidado y la atención al cliente estarán acorde con el marco en el que se desarrolla una experiencia gastronómica basada en cocina de mercado con excelente factura. Grandes profesionales en sala, muy buena recomendación por parte del encargado de la bodega. Muy recomendable.

Impresionante, todo un agradable descubrimiento en tierras palentina. Insuperable producto y excelente elaboración. Servicio profesional, de lo que ya se ve muy poco

En otras ocasiones ya habíamos comprobado la profesionalidad de este equipo pero este verano no salimos tan contentos del restaurante. Mientras nos tomaban nota de cual iba a ser nuestro menú familiar, nos ofrecieron tomar una bebida, la cual vino posteriormente reflejada en la factura. Pedimos 3 vinos blancos, entre otras bebidas , recomendados por el camarero y al ser de nuestro agrado decidimos pedir una botella para la velada. Nuestra sorpresa fue la relación/precio. Las 3 copas cobraron 18€ y la botella 26€. Todos sabemos cuantas copas salen de una botella y la verdad que a los que estuvimos ese día allí no nos salían las cuentas. En cuanto a los gin tonic, poco que decir, salvo que para lo que cobraron, 12€/unid. Podían haberlos preparado con esmero. Creo que hay detalles que tienen que mejorar ya que es un lugar de prestigio.

Hemos comido aquí en varias ocasiones y siempre muy bien. La calidad de la comida, el local y el servicio, están por encima del precio, aunque se ha incrementado levemente desde la última vez que acudimos en 2023.

Estupendo restaurante en un lugar que no te lo esperas. Amplísimo comedor, con bonita decoración..Mesas muy amplias para disfrutar de la comida y de una buena sobremesa. Camareros atentos, amables y correctos. Comida: de gran calidad ( tomate excepcional) .stik tártaro muy bien condimentado…y toda la comida muy rica.Salimos muy satisfechos y todos los veranos visitamos este bonito sitio. Muy recomendable. Os invito a visitarlo👍👍👍

Tras una recomendación hemos decidido probar este restaurante para un almuerzo en familia, durante nuestras vacaciones que hacemos todos los años en la provincia de Palencia. Si bien los platos que hemos probado han sido de indudable calidad, con el servicio en mesa hemos tenido una experiencia para comentar. Hemos probado tomate aliñado, las alubias (especialidad), la flor de calabacín, el lechazo y el cochinillo, todo de una calidad notable. Con relación al servicio en mesa, nos han pasado varias cosas cuanto menos curiosas. - Con más de 30º grados en la calle no nos toman comanda de bebidas, tenemos que esperar hasta que nos atiende la señora (maître) que toma comanda de comida, sin bebida. - La señora que nos ha tomado nota para cuatro comensales ha insistido varias veces indicando que lo que pedíamos era poco e insistiendo que era solo un plato por persona, nos ha hecho sentir incómodos. - Tras insistir el camarero que toma comanda de bebidas se va sin preguntar si era todo, teniendo que llamarle varias veces. La misma situación nos ocurre con los postres, al pedir café entiende que no vamos a pedir postres teniendo que volver a llamarle para que nos atienda, haciendo aspavientos, con una actitud que no nos ha parecido la adecuada al sitio en el que nos encontrábamos, algo surrealista. Como comento una experiencia culinaria buena desde el punto de vista de los platos, empañada por un servicio mejorable, quizás hayamos tenido mala suerte. La otra camarera que nos atendió sí era encantadora, menos mal!.