Espai La Vall en Tarragona

Fabulosa cafetería completamente libre de gluten. Estuvimos de visita por un par de semanas y me encantó este lugar porque no tenía que preocuparme por sentirme mal más tarde. Su comida es muy sabrosa y el precio muy razonable.

Todo muy bonito, sabroso y limpio.

la señora fue muy atenta y como teníamos prisa no nos cobró 10 céntimos

Todo un bar sin gluten, aunque a parte de desayunos también ofrecen bocatas y platos combinados muy ricos. Las tartas muy ricas también.

Cafetería del barrio la vall , con un toque más sofisticado. Disponen de dulces y pastas caseras. Hacen bocadillos, platos, tapas, llescas, etc. Hacen unas galletitas con unas estrellas que a los peques les chifla.Tiene un pequeño rincón para los más pequeños con juguetes y libros para entretenerse, que se agradece. El local no es muy grande y cuando está a tope se nota el bullicio. Dispone de terraza . Las chicas que lo llevan son muy atentas y agradables.

SUPER RECOMENDABLE! Todo sin gluten y sin peligro de contaminación. Tienen variedad de platos (bocatas, tostadas, cocas, ensaladas, milanesas) y dulces caseras (pastel queso, bizcocho de chocolate, de limón...). Mi favorito tarta de coco y dulce de leche y no me podría ir sin probar los alfajores! Personal super amable y atento!

Me encantan las tartas y las galletas que hacen son buenísimas y sin gluten. La única pega es el olor a fritura durante las comidas.

Tiene un rinconcito para los crios estar distraído, cocina casera y cercana, me gusto mucho el ambiente familiar que despide este negocio

Está bien para desayunar o tomar algo. Hemos estado desayunando un café con leche y un mini bocadillo de fuet, además de un cacaolat. El desayuno podríamos decir que está bien, aunque la relación calidad/precio la veo excesiva. El desayuno ha costado 7,20 euros, que si lo comparo con los desayunos que tomamos casi cada día en Roda de Berà, que es donde resido, y que suelen costarme entre 5,49 euros y 6,00 euros, no hay color. Los mini bocadillo que desayunamos, que son calientes (que siempre son más caros que los bocadillos fríos), además son muy grandes, aunque realmente sean mini. En cuanto a los aseos, estaban muy limpios.

Excelente cafetería con productos artesanos y de calidad. Muy buena atención y dispone de una zona de juegos para los peques. Deberían haber más sitios como este!