Els pins en Cambrils

Nos salvaron la vida, íbamos de viaje, con los supermercados recién cerrados y los locales de al lado impracticables, el señor que nos atendió fue muy amable y nos hicieron bocadillos para llevar que nos llenaron de energía y el ❤️❤️❤️

Nos sorprendió gratamente lo que podría parecer un restaurante grande y turístico de comida congelada. En primer lugar, la bienvenida fue excelente, con un servicio sumamente atento y dedicado. Los menús están muy bien diseñados, son visualmente atractivos y están disponibles en cuatro idiomas. Además, son interactivos para niños. Todos los platos que pedimos fueron muy satisfactorios, tanto en calidad como en cantidad. ¡La carne estaba excelente! El local está decorado con mucho gusto. ¡Enhorabuena a este establecimiento!

Comimos allí cuatro veces durante nuestro viaje. Todas las veces fue excelente. Desde la paella hasta la carne y el pescado, todo estaba muy bueno. El servicio fue muy amable y ya estamos deseando que llegue el año que viene. ¡Gracias, sigan así!

Una sopa de pescado de primera, deliciosamente llena de sorpresas recién traídas del mar. Seguida de deliciosos langostinos. Y todo súper picante y delicioso. Sin duda, la número 1.

Buen ambiente, la comida sabrosa. Muy tranquilo en esta época otoñal.

Acabo de disfrutar de una comida estupenda aquí, con una mariscada para dos. Además, el servicio fue excelente y la relación calidad-precio fue excelente.

Excelente comida, servicio muy amable y vistas espectaculares al mar. 🌊 Un lugar perfecto para disfrutar y relajarse. ¡Muy recomendable!

Comida deliciosa, personal súper amable. Ambiente encantador, vistas al mar. Sin duda volveremos estas vacaciones.

Elegimos ir allí por capricho al pasar por delante del restaurante y nos gustó su aspecto y la carta. Era bastante tranquilo, pero claro, era principios de octubre y todo parecía tranquilo. Nos sentaron rápidamente en una mesa de nuestra elección, y nuestras bebidas llegaron poco después. La decoración tiene un toque náutico y había algo interesante por todas partes, incluso en los baños. Pedí costillas con patatas fritas, que me encantaron porque la carne se desprendía del hueso. Mi mujer comió champiñones y pasta. No le gustó y cree que fue por el aceite; fue su delicadeza y no culpa del chef. La camarera insistió en que mi mujer pidiera algo más sin pagar la pasta. Aceptó un plato de patatas fritas cuando yo casi había terminado. Pagamos la comida y las bebidas. Llegó la factura sin el precio del plato de pasta y, tras unas palabras amables, insistimos en pagar el precio completo. Una vez más, nos ignoraron, creo que un miembro del personal con más experiencia, o quizás el dueño. Al final, dejamos una buena propina para compensar el precio de la pasta. Eso pareció contentar a todos. A pesar de que a mi esposa no le gustó la comida, todo lo demás fue excelente.

Sorprendente, un sitio a pie de playa...esperas encontrar más de lo mismo..y tachan! Un sitio ideal con una gente ideal, atención de 10. Genero de de 10. Olé! No os lo.perdais!