El Tronky en Marina de Cudeyo

Somos de Santander. Todos los años vamos por lo menos una vez y siempre acabamos riéndonos porque, pidamos lo que pidamos, y nunca pedimos pescado, no salimos por menos de 80. Todo (rabas, navajas, tomate, ensaladas, sardinas, mejillones, almejas, gambas, etc.) está bueno. En los postres, sobre gustos, pero con las tartas de queso que hay actualmente creemos que la suya se ha quedado. El trato serio, pero agradable. El servicio rápido. En resumen, siempre vamos porque está rico, pero es un pelín caro.

Buen producto, comimos pescado: almejas, sardinas y lubina. Si que cogimos más de la cuenta de ración de lubina y podríamos haber repetido de sardinas en su lugar porque estaban espectaculares. El postre de hojaldre increíble y diferente de ver.

El lugar es espectacular, al igual que el genero con el que se trabaja. El servicio rápido e inmejorable, el personal es encantador!

Asador muy recomendable. Además encontrarte con Papin y las Pombo….ya no tiene precio. Muy recomendable.

Si vas a Santander tienes que hacer una escapada a este asador de Pedreña. Recomiendo el pescado a la brasa que está exquisito. Recomiendo reservar porque si no no vas a encontrar sitio. Nosotros fuimos en temporada baja, con un día de lluvia tremendo y el local se llenó en un momento. El personal os recomendará el pescado del día y su tamaño y vosotros elegiis. La lubina y el besugo espectaculares.

Todo lo que pedimos estaba muy bueno, la lubina a la brasa espectacular, servicio rápido y muy amable. La única pega es que se nos disparó la cuenta

Gran calidad a un precio equilibrado. Nos recomendaron este sitio y gastronómicamente hablando fue todo un acierto. Las almejas al ajillo eran buenísimas y la lubina a la brasa estaba perfecta, de calidad y muy bien cocinada. De postres destacaría la tarta de queso, era un manjar (y gigante). El ambiente… bueno… no es un sitio especialmente lujoso, pero tiene su encanto y su toque marinero

31/03/2024 Editamos reseña, hoy la calidad NO ha compensado el trato. El rodaballo no estaba del todo fresco, y las rabas estaban mal fritas, soltando mucho aceite. Los camameros de siempre ya de un desagradable insoportable. Nos han leído la cartilla por entrar y eso que nos habían dado paso, pero como al de la puerta (sí, el mismo que la anterior vez me dejó fuera calándome aunque tenía reserva) ha discurrido después que no nos había preguntado el nombre, pues nos ha caído chorreo. Que luego se lo han echado por lo menos a 4 grupos después de nosotros, pero mal de muchos no es consulelo de tontos. Solo una de las camareras ha sido amable, la pobre era nueva y no sabía que para trabajar en el Tronky hay que ser borde. La otra que nos ha tocado, ni educación, ni siquiera mirarte cuando la la hablabas, el por favor y el gracias debe ser de otro idioma. Y salir de mal humor. Hartos ya. Anterior reseña: Es uno de los mejores restaurantes de Cantabria. La calidad es excepcional. Siempre merece la pena ir. Dicho esto, cada vez se nos está haciendo más cuesta arriba el plan de ir al Tronky. Reservar es muy difícil no solo porque esté lleno, sino porque los horarios en los que puedes llamar son muy restringidos. Y luego te llaman varias veces para confirmar. A mi marido ya le empezó a molestar, deciamos, "Y si no llego a tiempo de contestar al tlf. ¿me quedo sin reserva?" Y el trato, bueno, es correcto, pero no dejas de sentir que te están haciendo un favor. Como digo, hay que ir, cuando tenemos visita hacemos lo posible por llevarles, pero a mí, personalmente, ya me está cansando.

Una vez más aprovechamos una visita a Pedreña para disfrutar de la comida, el servicio y la atención de este extraordinario asador. Los platos que tomamos estában a la altura que esperábamos:Excelentes! Repetiremos sin dudarlo👏😊

𝗘𝗹 𝗧𝗿𝗼𝗻𝗸𝘆 es un clásico a las afueras de Santander. Imprescindible pedir las 𝘴𝘢𝘳𝘥𝘪𝘯𝘢𝘴 𝘢 𝘭𝘢 𝘣𝘳𝘢𝘴𝘢, ¡riquísimas! También algún pescado a la brasa, o las rabas, típicas de la zona. Mejor reservar.