El retrogusto es mío en Valle de Egüés

Me encantó el ambiente del Bar.

Me encantó y los falafel deliciosos un ambiente bien rico

Un sitio excelente para pasar el rato tomando o comiendo algo fuera de lo normal. Buen surtido de cerveza de caña que difícilmente encontrarás en otra parte. Refrescos naturales y especiales. Una vinoteca digna de mirar... y comprar alguna botella también. Trato bueno y personal atento que conoce perfectamente lo qué está sirviendo. En mi próxima visita tengo que centrarme más en la comida, que tenía muy buena pinta a simple vista. Para mí, excelente.

Un local muy pequeño, acogedor con el volumen algo alto y una atención correcta. Las raciones para mí gusto algo pequeñas. Comida correcta pero sin nada destacable.

Un lugar espectacular un ambiente fantástico falta más color en relación a México pero sin nada que envidiar a otros lugares. Respecto a la comida tiene su estilo con la verdadera comida mexicana está deliciosa. He recorrido todos los mexicanos de Pamplona y este puedo decir que es el más rico a mi parecer. Como entrante pedimos unos nachos especiales que fueron deliciosos hasta mi hija de 4 años se comio todo. Los tacos que al final no sabes que cantidad tendrás pero por relación precio ( 3 en cada ración) pediría uno de cada. Sobra decir que mis acompañantes pidieron hamburguesas que no tenían mala pinta. Respuesta de ellos: está para repetir

Fantástico y acogedor gastrobar con comida y maridaje de calidad.

A veces se nos llena la boca hablando de la oferta gastronómica de otras ciudades y no somos capaces de valorar locales tan maravillosos como el Retro. El trato cercano de Ana (para un servicio, una compra online, resolver una duda sobre vinos o cervezas...) lo convierte en un sitio auténtico y especial. Sin otra ambición que hacer las cosas bien y respetar a productores cercanos, generando comunidad en el barrio y la ciudad. Cada vez que se lo descubro a alguien, sale maravillado. ¡Y que sea por muchos años más!

Grandísimo local con exquisita selección de vinos y cervezas (el agua no me dió tiempo a probarla) que permite disfrutar según presupuesto (yo a botella limpia). La comida no se queda atrás y ofrece una cuidada selección de platos muy ricos (si fuera un influencer de Instagram diría “divertidos”): natxos y tacos de todo tipo, ESPECTACULARES QUESOS, burguers sabrosísimas…y ya quiero volver. Si ves a Ana en barra, aprovecha y pide que te recomiende algún vino o cerveza. Fiáte. Acertará mejor que tú. Disfruta en un ambiente muy agradable y con su exquisita oferta de comida y bebida. Pd: y me llevo una caja de vinos varios de su selección. Merecen mucho la pena.

Fue mi primera visita y la verdad es que el sitio es muy acogedor y bonito, no pudimos cenar porque no teníamos reserva y nos tuvimos que ir. Encontré dos pegas que pienso son fácilmente mejorables, una es que había una cata de vinos y no pude acceder bien al espacio de la tienda y otra es que de nuestras consumiciones en barra y mi compra de cerveza en la tienda ninguno de los das personas, un chico y una chica, que me atendieron, ninguno me dio las gracias, ni por la compra ni por el consumo en barra, no deja de parecerme curioso, siempre hay que agradecer a los clientes su paso por el negocio, compra y consumo y lo digo yo que he trabajado 20 años en hostelería. De todas maneras enhorabuena por el lugar, volveré algún día.