Pequeña joya de polígono industrial. Comida tradicional española sana. El menú del día cuesta 10 euros y 3 platos. Visite de vez en cuando, el menú cambia a diario. Ensalada fresca compartida para la mesa, encantadora canasta de pan fresco para compartir. Hoy fue champiñones y huevos revueltos, seguido de huevo frito con salchicha y papas fritas tanto para mí como para Rex y Lisa optó por una abundante sopa de legumbres para comenzar, seguida de jugosas brochetas de cerdo marinadas con papas fritas cortadas a mano. No hubo postres para ninguno de nosotros, pero el dueño se ofreció a reemplazar el postre con un café, así que aceptamos eso. Si su español es tan bueno como el nuestro, necesita el traductor de Google para saber qué está pidiendo. Recomiendo encarecidamente este lugar para disfrutar de una comida sencilla, sencilla y sabrosa sin complicaciones. Siempre lleno de lugareños y trabajadores a la hora de la siesta, generalmente es fácil estacionar afuera.
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