19/07/2025: Sitio acogedor y ambiente tranquilo
22/05/2025: Solía ir allí con frecuencia, con dos dueños distintos. El nuevo es un poco impersonal, pero lo gestiona mejor que el anterior. El ambiente y los precios son aceptables, aunque algo flojos. El club es de los últimos en cerrar, situado al final de la calle, casi en el muelle, con una bonita vista. Una pequeña escalera a la izquierda baja al puerto. Sin embargo, evitaré el sitio, ya que tiende a convertirse en tema de conversación si vas muy a menudo, sobre todo cuando ya has bebido bastante. Era un lugar al que siempre podía ir porque era muy tímido, y el camarero siempre era amable y entretenía a la gente con bailes y chistes. Es una buena alternativa a los camareros habituales que solo molestan a los turistas. En general, es una buena opción; merece la pena visitar el bar. Mi consejo: se llena más después de las 11 de la noche, cuando la gente anima el ambiente. El club no se está modernizando y está amueblado de forma sencilla y sin adornos, lo cual no supone ningún problema. A veces, el dueño te invita a la terraza, desde donde se disfruta de una vista maravillosa del puerto. Es una pena, porque la última vez que pasé por allí en 2021, me vio pero no me saludó. Aun así, me sigue gustando el lugar. Tiene mucha historia, y se nota la diferencia entre los dos dueños a lo largo de los años; se ve que el negocio va bien cuando el dueño está al mando. Hace un trabajo excelente. Pero debería ser más cercano. Un saludo, Noah.