El Horno en Caravaca de la Cruz

Fuimos un Domingo a comer sin reserva y nos pudimos sentar fuera. Pedimos un par de entrantes y la carne al centro. Todo buenísimo, nos dejamos aconsejar por el camarero con el cebón y sin duda fue todo un acierto, estaba espectacular, lo único que eche de menos fue un poco de verdura o patatas para acompañar.

Todo está buenísimo, solo le eche foto a las patatas bravas, hamburguesa espectacular y gyozas de buey impresionantes…….

Un restaurante muy recomendable tanto por el ambiente logrado como por las elaboraciones culinarias. No os lo perdáis si estáis en Caravaca

Buena experiencia , precio un poco más caro que otros

Fuimos por primera vez nos atendió Adrián un chico ,muy simpático, atento, su asesoramiento en todo momento de 10 inmejorable, volvería sin duda ha este local, la comida hay que decir que es un espectáculo y bastante rápida para llegar ha mesa ,ha la hora de la cuenta y ha la hora de irnos esta persona se mostró de 10 como al principio, por lo cual repetiremos, todo 10 de 10.

El encargado andrian es el mejor camarero que hemos tenido nunca sitio espectacular

Junto con el restaurante, muy recomendable!

He cenado en el restaurante y la verdad es un espectáculo y el encargado en un profesional como la copa de un pino. Besos desde Pamplona.

Restaurante con decoración industrial y rústica, que destaca por su cálido ambiente y su combinación de colores en sus mesas preparadas. Comida de primera calidad con una presentación de platos impecables y riquísimos con fabricación propia y nada de congelados. Sabores diferentes, explosivos y sabrosos. Cabe destacar, que comí el mejor pulpo que había probado en mi vida. Servicio rápido, profesional y con muy buenas recomendaciones por parte del camarero. Recomendado 100%

Visitar El Horno ha sido una auténtica delicia. Desde que entramos, el trato fue cercano y muy profesional. El ambiente acogedor y el cuidado por los detalles hacen que te sientas como en casa. La comida, simplemente espectacular. Probamos varios platos de su carta y todos estaban llenos de sabor, bien presentados y con productos de excelente calidad. La combinación de tradición y creatividad en sus recetas es de lo mejor que hemos probado en la zona. Mención especial al horno de leña, que aporta un toque único a los platos, y al personal, siempre atento y con muy buenas recomendaciones. Además, la relación calidad-precio es inmejorable. Sin duda, un lugar para repetir y recomendar. ¡Gracias por una velada inolvidable!