Es el auténtico quinto y tapa. Tomes la bebida que tomes te sacan tapa de forma individual, la única pega es que las camareras en alguna ocasión se descuentan y tienes que pedir que te saquen la tapa aunque es de entender porque siempre está lleno de gente e intentan no repetir tapa. Es preferible que llames para reservar.
Las camareras muy simpáticas... pero éramos muchas mesas y hacían todo lo que podían, la verdad. No paraban ni un minuto. Atentas y profesionales.
Estábamos en terraza pero dentro con el aire acondicionado se estaba genial.
Bar emblemático de quinto y tapa en Alaquàs, buenos bocadillos, buenas raciones y buen servicio.
Un punto negativo, no hay cerveza de barril y el interior no es muy grande, pero la comida solapa estos puntos.
Para repetir.