El Cevichano en Sevilla

La comida estuvo increíble. El ceviche tenía la combinación perfecta de picante y agrio.

Excelente servicio, el mejor lomito salteado, y ceviche que he probado en España. Súper recomendado.

Un restaurante muy agradable con buena cocina peruana. Muchos platos incluyen mariscos o pescado. Muy sabroso y muy recomendable. El servicio también fue excelente.

Un ceviche delicioso, las bebidas exquisitas y la atención de 10, de verdad.

La cervecería estaba espectacular... ¡fresca, ligera y llena de sabor! La mejor cervecería de vieiras que he probado, y acompañada de una copa de cava, ¡le dio un toque especial!

Espectacular como siempre. No defrauda, deseando volver.

Mi experiencia fuimos ah este local y pedimos solo 4 cosas la pollada simple pollo y sal sin aliños la leche de tigre nada fuera de La simple para el local el chicharrón de pescado de 3 y el lomo simplemente malo el primero carne super dura y el segundo plato salado con un trozo de pescado dentro de la papa frita bueno comimos algo xq En fin pero para el Local nada de fuera de lo simple esperemos mejore el Sazón de la Comida

todo estuvo buenisimo, los camareros exelente trato, volvere

El mejor peruano de sevilla sin duda. La comida es excelente y el Personal que atiende maravilloso. Braulio el encargado es encantador y nos recomendó los mejores platos que disfrutamos con un buen pisco. Repetiremos sin duda.

Durante nuestra visita a Sevilla, tuvimos el placer de almorzar en este excepcional restaurante peruano. El pisco agrio era excepcional, comparable a la mejor catedral de pisco que se encuentra en Lima. La leche de tigre era inicialmente suave en ají, probablemente adaptada a las preferencias locales, pero después de solicitar una versión más picante, capturó perfectamente los auténticos sabores de Lima. También disfrutamos de la Conchita a la parmesana, que estaba deliciosa con sus vieiras tiernas, perfectamente gratinadas con una rica corteza de parmesano mantecoso que se derritió en la boca. La chaufa de mariscos fue un lugar destacado, repleto de sabores frescos de mariscos y notas saladas y ahumadas que nos transportaron instantáneamente de regreso al Perú. Para terminar, el pastel de limón era celestial — liso, abrasivo y perfectamente equilibrado con una corteza desmenuzable y mantecosa que complementaba el relleno picante. Una experiencia culinaria verdaderamente memorable que trajo un sabor de Perú a Sevilla.