El Caracol Moderno en Melilla

Una buena comida con productos de buena calidad. Hemos compartido, huevas, pastelas de pollo, pulpo, y pinchitos de pollo y ternera. De postre cuscus dulce acompañado de te moruno.

Sitio familiar con una excelente atención y muy bien de precio. Si quieres probar comida marroquí en Melilla, este es el sitio.

Un personal atento y cercano, el niño joven un encanto, en todo momento atento. La comida muy rica aunque debo admitir que al estar embarazada tenían poco repertorio apto para mi… Precios para mi gusto un pelín elevados para la zona y localidad… así como cantidad… pero tampoco muy desorbitado. Si os recomiendo muchísimo el postre de Marrakchia. Fue todo un descubrimiento y estaba buenísimo!!! Lo único que cuidado si os ofrecen té, la verdad que nos lo ofrecieron y pensamos que era un obsequio igual que en otros sitios te ofrecen un chupito gratis y no, nos cobró 2€ a cada uno… eso sí, buenísimo. Si queréis probarlo merece la pena pagarlo, pero si os lo ofrecen que sepáis que no es gratis… la verdad que en esa parte me sentí un poco estafada. Aún así, por una vez os recomiendo ir a probar algo.

"Un lugar con mucha historia y tradición que sigue cautivando a todos los que lo visitan. El Caracol Moderno, con su carta variada y especialidades árabes, es un verdadero deleite para el paladar. La comida no solo es deliciosa, sino que está presentada de forma espectacular. Además, la atención es increíblemente cálida y familiar, lo que hace que cada visita sea aún más especial. La familia Amaruch, ahora dirigida por su hijo, sigue siendo un referente en la restauración melillense. Siempre salimos encantados y sin duda volveremos. ¡Totalmente recomendado!"

Muy buena cocina marroquí, su comida me gustó y su té maravilloso

Muy rico todo, el pescado muy fresco y muy bien hecho.LAs especialidades marroquíes también.Mi preferida la Marrachia de carne. bien servido

Ambiente muy agradable, comida exquisita, muy buena atención y precio estupendo! Fari estuvo muy a tentó y pendiente. Para repetir!!

Comida en grupo de amigos con ganas de experimentar cocina marroquí. El local es amplio y está siempre concurrido, aunque no se nota el bullicio. Pastela y cuscús decentes, aunque al cuscús, que iba bien de sabor y verdura, le faltaba “chicha”. Pinchitos de ternera y de pollo con buen sabor y blandos. Tallín, bien. Postres de buen sabor. Carta de vinos corta, pero buenas elecciones. Camareros agradables, sin que se noten. Excelente experiencia.

Solo falta que tengan cerveza sin gluten, con alcohol. Por lo demás bien.

Todo de 10. La comida espectacular, platos súper abundantes, el servicio de 10, el local MUY bonito, no es nada caro relación calidad/precio. Hasta los baños estaban limpios y son bonitos! Y un detalle es que al irnos hemos preguntado donde había una parada de taxis y ellos mismos nos lo han pedido! Así da gusto…