El Cairat en Falset

Almorzamos en El Cairat por el cumpleaños de mi mujer, por recomendación de un amigo que creció en Falset. ¡Fue una experiencia maravillosa! Cada punto de contacto con Mercé, propietaria y cocinadora de El Cairat desde hace 40 años, fue perfecto. Es una anfitriona fantástica: amable, atenta, complaciente y amigable tanto en el correo electrónico como en persona. Ella fue de gran ayuda con los requisitos dietéticos de mi esposa y nos hizo sentir como en casa desde el momento en que cruzamos la puerta. La comida es realmente buena, basada en los productos del Priorat, y un poco más creativa que la mayoría de los restaurantes de la zona; por ejemplo, algunos platos están influenciados por el estilo de cocina judío sefardí. Empezamos con el vermú de la casa y elegimos del menú 'Sugerencias'. Estaba bien preparado y muy sabroso. El vino que eligió Mercè fue excelente. Pero es el ambiente cálido, informal y relajado que Mercè crea en st El Cairat lo que lo hace realmente especial; el cariño, la conversación, el sentimiento de que eres familia. Fue un cumpleaños muy memorable. ¡Gracias Mercè!

Muy buena atención, comida casera y muy sabrosa. Un reataurante muy recomendable.

Buena relación calidad-precio y buen servicio con productos de proximidad.

Un lugar donde el sentimiento y la calidad llega al plato, cocinado con cariño y servido con profesionalidad. Gracias por la experiencia. Hemos disfrutado del menú del aceite. Más como él

lo hemos descubierto casi sin querer...pero un acierto total,super bueno todo y yo lo pongo muy difícil con mis alergias e intolerancias,está todo de Diez!La dueña explica cada plato lo que lleva,sabe mucho de vinos y te recomienda,y en general muy bien,volveremos.Gracias por todo.

Habíamos leído buenos comentarios, pero creo que se quedaban cortos. Hicimos el menú del aceite...las explicaciones fueron un plus. ¡Disfrutamos tanto! Muchas gracias.

Le doy 5 estrellas a la comida, servicio y ambiente pero 3 en total por el excesivo precio de la cuenta final. Pagamos 60€ por una botella de vino, pica pica, segundo y postre. No era un menú degustación ni mucho menos pero bueno, puede ser que nos metieramos en un restaurante exclusivo y muy casero de la zona. Comimos muy bien y la dueña y camarera muy amables pero el precio un poco desorbitado.

Pequeña vinacoteca con asesoramiento sobre vinos, personal muy atento y amable. Lugar muy acogedor. Vinos muy buenos, que puedes degustar con mesa de quesos, si eres amante de estos, vale mucho la pena.

¡Un pequeño restaurante increíble con clase muy alta pero con un ambiente hogareño! Los propietarios (supongamos que ella era la dueña) fueron muy amables. Menú en inglés y español, ¡así que no te preocupes!

Es un restaurante pequeño pero muy bonito y la persona que atiende es una maravilla. Amable, te explica todo lo que tienen y las opciones que puedes elegir. Lo que comimos fue impresionante, no hubo nada que no nos gustara, al contrario, fue un disfrute continuo. Volveremos seguro. Disponían de tres menús, diario, fin de semana y de aceites. Un placer para los sentidos. No dejéis de ir si pasáis cerca.