El Bambu en Almuñécar

Encantadora visita a un bar de playa que sirve fantásticos platos de pescado fresco. Personal muy amable (algunas críticas no coinciden, pero nos pareció que eran muy atentos). El lugar tiene un aspecto elegante y una gran manera de pasar una noche teniendo algo de comida bien cocinada y bien presentada.

Hemos estado en varias ocasiones a mitad del mes de julio y la comida ha sido buena todos los días, me sorprende ver ahora una cantidad importante de opiniones que hablan de comida de mala calidad. En nuestro caso no ha sido así y hemos comido al menos tres días allí de forma satisfactoria. Es un chiringuito en la playa muy bien ubicado y con muy buenas vistas, ya que se encuentra sobre la arena. En cuanto a la comida, como digo al principio en líneas generales ha sido muy buena y hemos pedido en estos días pata de pulpo asada, dorada al espeto, espetos de sardinas, almejas, mejillones, arroz... lo único que nos decepciono por estar un tanto insípidas y apelmazadas fueron las migas. He de decir que no sirven tapa con la bebida como suele ser costumbre en la zona, y si bien se supone que sirven un pequeño aperitivo con la primera bebida esto queda a discreción del personal y por tanto depende de que le gustes más o menos... en los tres días vimos como a otras mesas si se lo servían mientras que a nosotros solamente nos servían la bebida, no se si se deberá a que esas otras mesas solían ser muchachas jóvenes o a otros motivos. Esta distinción de trato en función de lo que le parezcas al personal hace que baje la puntuación del lugar. En cuanto al servicio, es correcto pero lento. El trato de los camareros es bueno, pero no parecen tener zonas asignadas y se aprecia una falta de coordinación que en ocasiones dificulta que te atiendan. Respecto al espetero, hace un estupendo trabajo y consigue que todo lo que pasa por sus manos quede riquísimo. Eso si, si te toca una mesa junto a la barca saldrás bien ahumado.