El Aljibe en Cuenca

Excelente ubicación, aunque descargar el equipaje puede ser un desafío, pero es el precio a pagar por tener el hotel en una ubicación súper céntrica en una calle pequeña. Las habitaciones (la nuestra está en el cuarto piso) son grandes y encantadoras, pero podrían necesitar un poco de mantenimiento (el soporte del secador de pelo todavía cuelga de milagro). El desayuno se sirve en el bistro del hotel... ¡tuvimos que levantarnos dos veces para conseguir los menús y luego ordenar y el lugar no estaba exactamente lleno! Todavía estábamos sentados cuando empezaron a limpiar la mesa de al lado de la nuestra con los habituales detergentes químicos. ¡Te dejo que imagines el olor! También cometieron un error con mi pedido y definitivamente la calidad podría mejorarse. Recepción en recepción a la llegada por un hombre brusco, grosero y además ineficiente (no encontraba la reserva). Mucho mucho mejor la señorita en el check out a la mañana siguiente. Luces y sombras en una ciudad fascinante

Hemos pasado 2 noches en la habitación numero 303 de este hotel.La habitación unas vistas maravillosas.Pero en el descanso que es muy importante!! Fatal!!Tiene una cama con dosel, que tiene su antigüedad y cada vez que mueves te despiertas.Por favor tomen nota para los próximos clientes que tengan un buen descanso!!.Cuenca es una ciudad que merece la pena visitarla caminando.Asi que este mensaje va destinado al propietario del hotel.Hay que descansar bien y mantener bien lo más valorado por los clientes DESCANSAR EN UNA BUENA CAMA!!

A ver, el mando funcionaba, a veces. Hay veces que no me iba... Pero bueno, el hotel en si, no tiene piscina. Pero si que tiene ascensor. Las habitaciones comodas y hay también ascensor, para bajar a la cafetería. Bueno en total, 5 estrellas para este hotelazo.

Una ubicación perfecta para visitar el centro de la ciudad donde está toda la zona monumental, las mejores vistas y los mejores restaurantes. El hotel está en un edificio antiguo pero perfectamente acondicionado, con habitaciones espaciosas y muy bien aisladas, pues no hubo necesidad de encender la calefacción a pesar del frío exterior. Tuvimos spa gratis de una hora por estancia de al menos dos noches. Sencillo pero cumpliendo su función, con sauna de vapor y seca y bañera de hidromasaje. Del restaurante sólo probamos los desayunos, muy buenos por cierto.

Hotel muy bien situado La estancia coincidio con Semana Santa, y la proximidad del hotel a la catedral, y el ajetreo subsiguente condiciono la estancia para bien y para mal. Para bien por la ubicacion , para mal porque entraban y salian personas ajenas al hotel constantemente, en detrimento de los huespedes. El hotel se aprecia cuidado y limpio. La habitacion no correspondio con lo contratado, de forma muy negativa. El personal de recepcion de mañanas muy atento y profesional Las camareras del hotel igual, muy bien. Problema con ducha solo puntual Restaurante mejorable, personal atento, pero colapsado por las fechas.

Hotel mediocre, no muy bonito. El personal de recepción es antipático y no explica nada sobre las opciones de desayuno ni sobre la ciudad.

El hotel no está tan bien como parece en las fotos (las cuatro estrellas las debieron conseguir hace tiempo). Está todo bastante viejo. Los empleados lo compensan porque fueron encantadores. La ubicación inmejorable

Quiero felicitar a Mirella y Pablo por su profesionalidad y amabilidad, siempre atentos e intentando que la estancia fuera excelente. Volveremos!!! Gracias

Hotel con historia en Cuenca, céntrico y limpio, está en el momento de dar una pequeña puesta a punto ( pequeños detalles)

Yo le quitaria una estrella, se oye todo lo que hablan en las habitaciones, comprendo por la ubicación y el edificio, mate un bichos el primer día y cuando me fui al cuarto día aun seguía allí, habitaciones pequeñas, sin un mísero cepillo de dientes, que te lo dan en un simple hostal, además la calefacción centralizada , Tu no puedes cambiarla, en fin para el precio los he visto mejores