Detako Gastrobar en Almuñécar

Excelente comida, con atún de primerísima calidad y un trato excelente de Elena. Para volver siempre que pase por La Herradura y parada obligatoria para cualquiera que quiera cenar o almorzar por la zona.

Un espectáculo gastronómico! *Reserva con tiempo* Hacen de la cocina un arte, estilo japonés riquísimo, merece la pena cada € que pagas. Como consejo, dejate asesorar y atrévete con cualquier cosa que te ofrezcan porque esta todo exquisito.

Excelente todo, calidad, gentileza, sitio,

El mejor niguiri que he probado en mi vida. El ceviche, uno de sus platos estrellas, digno de probar. Un lujo la atención y el servicio. Les deseo lo mejor

¡Excelente restaurante y excelente servicio! ¡Y la comida estuvo increíble! ¡Lo recomiendo sin duda!

Érase un 15 de Agosto, camino a la Herradura para que mi marido tuviera un puente de buceo. No habíamos pensado dónde íbamos a comer y había visto la noche anterior este sitio que se.me antojó MARAVILLOSO Escribí a Elena, totalmente desesperanzada y me logró encontrar un sitio a las 14.30 en la barra. Ni que decir tiene que estaba EMOCIONADA. Así q llegamos felices y pedimos que nos sorprendieran con lo que quisieran. EL MEJOR MENÚ DEGUSTACIÓN QUE HE PROBADO!!! No puedo decir lo q comimos porque estaba concentrada en disfrutar de todos y cada uno de los sabores que iban danzando en mi boca con cada pieza. Como un chicle de Willy wonka, cada bocado te llena de placer, el pescado frequísimo, las salsas perfectamente escogidas, EL ARROZ SIMPLEMENTE PERFECTO.. y no dejemos de lado el postre, porque si el cacao pudiera insertarse en un naranjo o viceversa no saldría una mezcla más maravillosa que la panacotta de chocolate negro y naranja con frambuesa que comimos para despedirnos El mejor inicio de un puente que pintaba ser tedioso. Sólo mejorable con.. despedirnos de la Herradura volviendo 2 días después!! Gracias Elena y David por esta experiencia religiosa. Pd: por si fuera poco, el local aunque chiquitito es precioso y Elena, la dueña es UN AMOR DE PERSONA!!! IMPRESCINDIBLE PARA LOS AMANTES DE LOS NUEVOS (Y BUENOS) SABORES

Cuando un local limita sus horarios hasta acercarlo a una hostelería humana, sabes que también cuida el producto, el equipo y su propia sonrisa. Es lo que hacen David y Elena, con pasión y cariño. Felicidades por crear un espacio de placer culinario y humano.

No teniamos reserva y al final nos hicieron hueco, los dueños y el servicio encantadores, noa dejamos q nos sirvieran lo q quisieron y acertamos plenamente, todo buenisimo, destacando el pulpo, el pollo, y tataki de atun entre otras cosas q fueron uma delicia, volveriamos sin dudar

Estuvimos almorzando en la barra de Detako Gastrobar y no podemos dejar de recomendar esta joya en Marina del Este. Desde el primer momento, el ambiente nos envolvió: cercano, acogedor y con un enfoque claro en el detalle y la calidad. Tuvimos la suerte de comer justo frente al chef David, que no solo cocina con una destreza admirable, sino que también comparte con pasión cada matiz de sus platos. Nos explicó que el nombre del local, Detako, nace de una combinación muy personal: D, por David, E, por Elana, su pareja, y Tako, que en japonés hace referencia al tiburón (o el pulpo, dependiendo del contexto), símbolo de fuerza y mar, muy en sintonía con la filosofía del restaurante. 🍾 Abrimos con una botella de Firmo Godello, un blanco vibrante que maridó a la perfección con unas ostras que eran pura frescura. Una auténtica explosión de sabor en cada bocado. 🐟 El tataki de atún fue una auténtica obra maestra. Tierno, jugoso, con un punto de cocción perfecto. Se deshacía literalmente en la boca… y sí, se nos saltaban las lágrimas. 🔥 El tartar de atún picante fue una auténtica locura: intenso, equilibrado y con ese toque justo de picante que lo hacía B R U T A L. Una combinación de sabores que no te deja indiferente. 🍣 El sushi, recomendado por el chef, cerró la parte salada con un nivel altísimo. Creativo, sabroso y perfectamente ejecutado. 🍫 Y el postre… madre mía. Un cremoso de chocolate con un toque de naranja, pipas garrapiñadas y frambuesas frescas. Increíblemente bueno, redondo. Tan bueno que mientras lo comíamos ya reservamos para el próximo sábado. Detako es mucho más que un restaurante: es una experiencia culinaria íntima, cuidada al detalle, con alma y con sabor a mar. Gracias David y Elena, en especial, por vuestro trato cercano, tu talento y por hacernos sentir como en casa. ¡Nos vemos muy pronto!

INCREÍBLE. Creo que deberían de haber más estrellas para sumar a la reseña. Inigualable el trato, la atención, la comida y el ambiente. Cercano y profesional a la vez. La comida es una obra de arte.