Desi y Pochi en Villaviciosa

Casa de comidas con excelente materia prima y cocina tradicional excelente.

La atención ha sido excelente. Nos sorprendió gratamente la calidad del producto, especialmente la ensalada de tomate, zamburiñas y calamares. Nos faltó probar el pescado que tenía una pinta muy buena. Repetiremos sin dudar, comida casera.

Encontrado por casualidad después de un intento fallido de comer en La Ñora, ha sido una sorpresa muy muy agradable. Restaurante de gestión familiar, con un trato excelente, simpático y servicial. El comedor sencillo pero bien decorado, fresco en verano. Un punto a favor es el parking propio. De primero una ensalada de tomates caseros (9€), sabrosa y refrescante. Los tomates con mucho sabor, son de su propia huerta. Luego, media ración de croquetas de compango(9€) riquísimas, como tener un pedazo de fabada en la boca, nada pesadas ni aceitosas. Lo mejor llego con el principal, una ventresca de pescado para 2 (30€), de tamaño enorme, bien jugosa, en su punto perfecto de cocinado, acompañada de patatas y una salsa de tomate exquisita. Absolutamente espectacular. Para terminar, una tarta de la abuela (6€) correcta. Quizás el arroz con leche habría sido mejor elección, pero estábamos llenísimos. Un sitio muy recomendable. Solo un pequeño punto no tan positivo: cobertura móvil casi inexistente en la zona, no preguntamos si tenían WiFi.

Quería destacar la atención del personal que fue agradable y cercana. Recomiendo la ensalada de tomates de la huerta, tienen un sabor auténtico de la tierrina. El arroz con leche no tiene foto, pero una cucharada vale más que mil imágenes. Gracias por el buen rato cenando.

Comida fresca y de calidad. Probamos el rodaballo y el arroz requemau de 10. Fuimos con nuestra perrita y ningun problema.

Es el mejor arroz con leche que comí nunca lo recomiendo muchísimo, una gran atención y muy cercano a la playa de la ñora

Un descubrimiento en mitad de un pequeño pueblo. Comida casera, fresca y de muy buena calidad. La fabada espectacular y el cachopin para los niños un acierto.

En Desi y Pochi todo sabe a casa y a calidad. El cachopo es excelente, jugoso y bien empanado, el tomate, fresco y lleno de sabor: delicioso y la atención al cliente, cercana y amable. Con precios razonables que invitan a disfrutar sin prisa. En un ambiente acogedor, es un lugar al que siempre apetece volver para degustar la cocina asturiana con alma.

Restaurante familiar donde siempre he comido bien y a un precio muy razonable y con raciones abundantes. Esta ultima vez me llamo la atencion que nos pusieron unos calamaras muy muy justos de frescos. Luego el Rubiel espectacular como siempre. No recordaba que fuera tan dificil aparcar pero igual esto dice cosas muy buenas del sitio!!

Productos de primera calidad y la comida deliciosa, el trato personal inmejorable, lugar totalmente aconsejable, lugar obligado para comer en Quintueles