24/06/2025: Restaurante coreano donde probar una buena variedad de platos tradicionales.
Destacar el bibimbap y los fideos de patata. 10/10
El pollo frito coreano, en la primera visita estuvo esquisito, hoy una de las variedades estaba un poco seco, el picante delicioso.
Recomiendo las empanadillas de kimchi.
No le pongo 5* porque en la carta general no ponen los símbolos de los alérgenos.
La atención de hoy fue un 10/10, personal súper atento y amable. Algo muy positivo hoy en día.
23/06/2025: En muchos sentidos, la labor de un crítico es sencilla. Riesgamos muy poco, pero gozamos de una posición por encima de aquellos que ofrecen su trabajo y su persona a nuestro juicio. Prosperamos con la crítica negativa —que es divertida de escribir y de leer—, pero la amarga verdad que debemos afrontar es que, en el gran esquema de las cosas, una experiencia modesta probablemente tiene más valor que nuestras palabras que la juzgan como tal.
Pero hay momentos en que un crítico realmente arriesga algo, y eso ocurre cuando se atreve a descubrir y defender lo nuevo. El mundo suele ser duro con lo diferente, con lo que rompe moldes. Y precisamente anoche, Gangnam me ofreció algo nuevo: una cena llena de sabores diferentes, y todos maravillosos. Cada plato tenía su propia personalidad, su equilibrio, su historia.
La atención fue excelente, con cariño y detalle en todo, desde lo más pequeño hasta lo más evidente. Se notaba una dedicación sincera, un respeto por el comensal y una pasión que impregnaba el ambiente. No fue solo una cena: fue una experiencia. Un lugar para repetir sin dudarlo.
Solía pensar que la autenticidad se diluía con la distancia cultural, pero esta cocina me ha demostrado lo contrario: lo auténtico no conoce fronteras. No todos pueden convertirse en grandes artistas; pero un gran artista puede surgir de cualquier parte —o de cualquier cocina que se atreva a ser fiel a sí misma—.
Volveré pronto a Gangnam, hambriento de más.