Cebú en Pozoblanco

Estuvimos un día para desayunar y bastante bien, las tostadas con tomate, aceite de oliva y jamón, zumo natural y cafés, hemos vuelto para comer, y por dos bebidas, media de ensaladilla rusa, media de berenjena, pincho de tortilla de patata y un flamenquin, casi 40€ Más caro que comer de menú los dos por ahí en el casco viejo, mala relación cantidad-calidad-precio. El flamenquin muy duro, algo correoso y con ternillas de jamón, francamente mejorable. Lo demás estaba bien sin más, el garito es acogedor y amplio, y el servicio fue correcto

Reunión de 26 personas en un salón reservado. La decoración preciosa, y una gran mesa en U Para compartir conversación con todo el mundo. Pese a ser menú de grupos, la atención fue excelente, siempre que necesitabas algo había un camarero dispuesto. Comimos mazamorra (espectacular), atún, carne a la brasa que se cortaba con el canto de un tenedor y unos postres muy originales, nada de pastelillos a compartir. Luego nos dejaron un rato adicional, separados del resto del local, para cantar (sin pasarnos). Comimos algo mas, pero no me acuerdo. Me encantó el sitio, la comida y el trato.