Casa Néboa en Negreira

Un lugar realmente acogedor. Disfrutamos de una velada auténtica con buena comida y vino, servidos con cariño. Buenas habitaciones. Lamentablemente, no creo que volvamos, ya que simplemente no soportamos caminar tanto. El Camino es duro.

Una estancia encantadora en nuestra primera noche del Camino Finisterre. La habitación era espaciosa y limpia. El baño también era estupendo. El restaurante estuvo genial tanto para la cena como para el desayuno.

Alquilamos 2 habitaciones para una noche, muy limpias, bien decoradas, el restaurante muy elegante,y el personal un 10, a 5 minutos del camino

Es el lugar perfecto para descansar después de trece millas de caminata. Está ubicado en una zona tranquila del pueblo. Las habitaciones están decoradas con elocuencia y son impecables.

A 30 minutos de Santiago de Compostela. Muy tranquilo. Perfecto para relajarse. Personal atento. ¡Lo recomendamos! Nos alojamos en la habitación adaptada para personas con movilidad reducida, ¡la única pega fueron las patas sueltas de una mesita de noche!

Ha sido un placer venir a Casa Néboa. Estoy haciendo el camino y al llegar cansada y con tanto calor, el recibimiento no ha podido ser mejor. La cena y la conversación inmejorables. GRACIAS Maria del Mar, Marilyn y Maria Teresa sois buena gente y hacéis que el camino sea especial🌈😘

Habitación bonita, grande y limpia...

Una casa absolutamente excepcional, que combina modernidad y autenticidad con un gusto excepcional. La bienvenida es cálida gracias a dos señoras de gran profesionalidad, una sencillez excepcional y una amabilidad sincera, algo que rara vez se encuentra hoy en día. La cocina casera, elaborada con productos de alta calidad, fue un verdadero placer. Una experiencia inolvidable; volveré sin dudarlo.

Nos alojamos aquí nuestra primera noche después de recorrer parte del Camino. Los anfitriones fueron de lo más acogedores y amables. A pesar de llegar con mucho calor y desaliñados 😅, nos dejaron la cocina abierta especialmente y se esforzaron por ofrecernos un desayuno maravilloso y abundante a la mañana siguiente. Éramos los únicos alojados, ¡pero sin duda debería haber más! Sin duda, volvería a alojarme allí; muy recomendable.

Me encantó todo de mi estancia aquí, ¡incluida la cena! Probé gulas por primera vez y todo estaba cocinado a la perfección. La habitación era impecable y cómoda. Mi mejor noche de sueño en el Camino.