Casa Leon en San Bartolomé de Tirajana

Simplemente un sueño. Fuimos a cenar con una niña de 6 años. Una velada maravillosa, comida excelente, y nos atendió una joven encantadora que cumplió todos nuestros deseos. Solo podemos darles las gracias y volveremos. Saludos cordiales, Miriam y Herbert.

Para nosotros, es el lugar perfecto para relajarnos. Magníficas vistas a las dunas de Maspalomas, lejos del bullicio. Buena comida. Servicio maravilloso. Excelentes recomendaciones de vinos de Nadia. Estaremos encantados de volver.

Simplemente magnífico la atención, el servicio, la cordialidad, la limpieza, la ubicación, la tranquilidad que se respira un lugar espectacular para descansar y desconectar del ruido diario. Ojalá poder volver pronto.

Experiencia absolutamente recomendable. Sales renovado de la estancia. Cada detalle está cuidado con una elegancia y calidez que hacen sentir al huésped como en casa, pero rodeado de tranquilidad. Quiero destacar especialmente las cenas preparadas por el chef, que fueron un auténtico viaje gastronómico: platos llenos de sabor, creatividad y una presentación impecable que reflejan una cocina de altísimo nivel. Cada velada fue una experiencia diferente y sorprendente, siempre con productos frescos y combinaciones exquisitas. Igualmente merece una mención especial la profesionalidad y cercanía de la maitre Nadia, que nos hizo sentir cuidados con una atención personalizada y genuina. Su conocimiento, amabilidad y dedicación elevaron todavía más la experiencia de cada día. Como único aspecto de mejora, estaría genial que hubiera una carta de vinos en la cena y una carta de los platos calientes que sirven en el desayuno (que son los que te hace el cocinero a demanda) Sin duda, Casa León Royal Retreat es un lugar que recomendaría a cualquiera que busque descanso, excelencia y un trato humano excepcional. ¡Estamos deseando volver!

Pura relajación con mucha paz y buena comida.

Una experiencia maravillosa, vine para una desconexión del día a día, del estrés del trabajo, entre otras cosas. Y la misión está más que cumplida. El entorno es genial, en el momento en el que escribo está reseña puedo asegurar que no se escucha nada de nada, un silencio perfecto. La habitación genial, amplia, la mia tenía balcón con vistas al mar y la montaña, vistas preciosas pero perturbadas por una calima que nos acompaña pero que no me ha impedido disfrutar de escapada para nada. El servicio, excelente, desde el chico de mantenimiento, el personal de recepción, las camareras de piscina, y como no, las chicas de la limpieza, que al volver de largas horas en la piscina, me dejaron la habitación en un estado perfecto. Mención especial el restaurante, las cenas han sido geniales, no sabía que el menú era cerrado y te iban dando lo que estaba programado, pero hasta las cosas que no suelo comer, las probé y me encantaron como el Timbale de Calabacín y Parmesano. Así que mis felicitaciones al personal de cocina, por un servicio tan genial.

Fuimos el fin de semana pasado a disfrutar del Day Pass. El hotel es precioso, está muy bien cuidado y súper tranquilo. Pudimos desconectar y relajarnos. En cuanto a la comida, soy vegana y a pesar de que no disponen de opciones veganas en la carta, tuvieron el detalle de adaptar los platos para que pudiese comer bien. Destacar el trato amable de todo el personal. Repetiremos sin duda.

Pasamos siete días en Casa León Royal Retreat. Llegamos tarde, sobre las 21:00, pero todo estaba perfectamente organizado: un sobre con la llave de nuestra habitación nos esperaba en recepción. Al entrar, nos esperaba una grata sorpresa: una tabla de quesos y embutidos y dos botellas de agua. El hotel tiene una ubicación privilegiada, lejos del bullicio, un verdadero oasis de paz y tranquilidad. Las habitaciones están decoradas con un estilo clásico, ligeramente anticuado. Se limpiaban meticulosamente a diario, al igual que todo el recinto del hotel y la zona de la piscina. Los desayunos y las cenas fueron fantásticos: tres platos y postre, todos frescos y deliciosos. El servicio en recepción, restaurante y cocina fue de primera: amables, serviciales y muy profesionales. Alquilamos un coche para toda nuestra estancia, así que después del desayuno, cada día salíamos a explorar la isla: montañas, playas y pueblos con encanto. Tras regresar a última hora de la tarde, nos relajamos en cómodas tumbonas, en la piscina climatizada y en el maravilloso jacuzzi. Otra ventaja fue el gimnasio, que si bien no era muy grande, era perfecto: pasábamos media hora entrenando allí todas las mañanas antes del desayuno. Casa León Retreat es el lugar perfecto para quienes buscan paz, comodidad y un ambiente único. Lo recomendamos encarecidamente.

Comimos del menú establecido y todo fue magnífico. El servicio fue genial, con personal muy amable. Los profiteroles eran divinos. Sin duda recomendaría el restaurante

Vimos que este restaurante tenía una fórmula a la hora del almuerzo por un precio muy razonable de 19 €. 90 E+P y no nos decepcionó. Entrada muy sabrosa y delicioso plato principal. Personal muy atento, amable y eficiente. Una experiencia totalmente agradable.