Casa Colon en Fuengirola

De los mejores restaurantes que he estado… la comida genial… cenar en una de sus ventanas cn vistas a la plaza es increíble… recomiendo ir antes de las 21 ya que no reservan mesa… muy recomendable

Justo en el corazón de la plaza de Fuengirola es una especie de institución. Brochetas de atún imprescindibles

Tuvimos una cena fantástica aquí. Buen servicio, buena comida. Precioso entorno en la plaza. Altamente recomendado.

+ Gran terraza + Gran personal + Excelente comida y bebidas

Restaurante encantador pero un poco demasiado popular porque no puedes hacer una reserva y tienes que esperar en una cola. Pero la comida y el personal son buenos. El restaurante está situado en una bonita plaza y tiene bonitas mesas tanto en el exterior como en el interior.

Ambiente muy agradable, la comida un 10. Pedimos bastantes cosas y ningún plato falló. Recomiendo bastante las chuletillas de cordero y las gyozas, estaban de 10, de los mejores que me he comido. El servicio también muy bueno, profesionales y cercanos al cliente.

Súper sabroso, cada plato, además un buen entrante es un chip por adelantado, buenos vinos y un ambiente muy agradable, muy recomendable en Fuengirola, sin duda volveremos cuando estemos por la zona.

Carta variada y con platos excelentes. El trato al cliente es exquisito.

Somos clientes asiduos de este Lugar y siempre hemos pasado un rato agradable .Pero ayer viernes 10 de enero estuvimos y fue horrible .El servicio bueno pero apenas disfrutamos la comida nos tocó sentarnos dentro y había una mesa doble donde estaba el dueño con los amigos y el escándalo era atroz no te dejaba ni conversar con el de al lado Pedimos mesa fuera nos dijeron debíamos esperan un par de parejas que habían delante y nunca nos dieron la mesa.Pero a lo que voy si veis al jefe que está en una mesa dentro con Amigos ni se sienten dentro será imposible comer tranquilo y poder hablar porque no han respetado el resto de los clientes que nos mirábamos unos a otros porque era increhible el escándalo que armaban fueron unas cuantas horas así. NOS OFRECIERON UNA BOTELLA DE VINO pero ni las bebimos porque teníamos la comida atravesada en el estomago .No fuimos a que nos regalaran nada si no a pasar un rato entre amigos agradable que eran nuevos clientes .Los camareros nos pedían disculpas pero donde manda capitán no manda soldado.

Este restaurante nunca defrauda.Su ensaladilla es espectacular y la brocheta de atún siempre la pedimos. Todos los camareros super profesionales.Nos atendió Antonio un chico portugués, debe ser nuevo porque no me sonaba de anteriores ocasiones,a a parte de ser muy profesional fue un encanto;simpatico y educado. Volveremos!