Cape Nao Beach Club Restaurant en Calvià

Maravillosa estancia y lugar idílico

¡Una estancia fantástica en el Melvia Calvià Beach! El hotel es moderno, está bien ubicado y a un paso de la playa. Las habitaciones están limpias y bien equipadas. Es una pena que tuviéramos la mitad con vistas al mar y la otra mitad a las azoteas del hotel. Mención especial merece el desayuno, muy variado y generoso, con una preciosa vista desde la terraza. Hay una piscina familiar y una piscina solo para adultos. El ambiente es tranquilo y animado, según la zona del hotel. Ideal para relajarse y disfrutar de la energía de Magaluf. A 10 minutos a pie del centro de Magaluf para salir de fiesta. ¡Lo recomiendo sin dudarlo!

Excelente. La atención de todo el personal es top. Las habitaciones son espaciosas y cómodas. El desayuno increíble. Todo está impecable. Hay todo lo que se podría necesitar para una estancia excelente sin tener que salir del hotel.

Comida muy buena, ambiente distendido, bien de precio y todo frente al mar. Ubicado en el nuevo complejo Melià, te ofrece buena calidad en sus productos, atención personalizada y buena música al caer el sol. Muy recomendable!

Comida muy buena, buen ambiente y buena música! Comimos diferentes paellas y croquetas y todo espectacular! La paella con sobrasada nos sorprendió a todos y nos encantó! Además el restaurante está en el Meliá South Beach y tienen unas vistas espectaculares! Repetiremos sin duda!

¿Por dónde empiezo? Si pudiéramos, le daríamos a este hotel un 11/10. Nos alojamos como huéspedes de Level, lo cual es una gran ventaja y justifica el coste adicional. La habitación tenía unas vistas impresionantes y estaba muy limpia; enseguida nos sentimos como en unas vacaciones de ensueño. Los huéspedes de Level también tienen acceso a una zona separada donde pueden disfrutar de bebidas refrescantes y aperitivos durante todo el día. Sin olvidar la hora del cóctel, un aperitivo fresco perfecto que no se puede criticar. El personal es muy amable y servicial. La primera mañana, tuvimos un problema con unos huéspedes que se llevaban nuestras toallas y sillas. Lo informamos y nos dieron una generosa compensación para garantizar nuestra comodidad. Gracias, Cristina, por el amable servicio. Los gerentes nos controlaban regularmente y están abiertos a cualquier comentario. No comimos ni cenamos mucho en el hotel, pero el desayuno estuvo fenomenal. Era un pequeño bufé, pero todo estaba excelente. También se podían pedir muchas cosas, como panqueques recién hechos, tostadas de aguacate, etc. Un pequeño consejo para mantener la calidad y la clase del hotel: los socorristas podrían ser más estrictos con quienes no cumplen las normas (demasiada gente en una misma cama balinesa, tomando bebidas en la piscina, etc.). Sería una pena que esto perjudicara la calidad del hotel. Además, la ubicación es fantástica: una bahía maravillosa para pasear, comer y disfrutar de lo que uno quiera. Palmanova está una bahía más alejada y también es muy recomendable. Magaluf es un pueblo con mucha vida nocturna, pero el Meliá Calviá está justo a las afueras, así que no hay ruido nocturno (habitación Level con vistas al mar). Durante el día, hay música alta de Nikki Beach, pero la disfrutamos. Gracias, Meliá Calviá, por la maravillosa experiencia; ¡sin duda volveremos!

Hotel con una ubicación excelente, a tiro de piedra del mar, bares, restaurantes, tiendas... El bufé estaba delicioso, y agradecí que hubiera varias piscinas. Muchísimas gracias a Erika por su amabilidad y consideración cuando mi hija enfermó, y muchísimas gracias al personal de limpieza de la cuarta planta, que dejó mi habitación impecable. También, gracias a May, la encantadora anfitriona del club infantil, que habla francés; se agradece mucho, ¡y las actividades son geniales! Lo que me habría gustado para mi madre, que ya es mayor, era una habitación con ducha (no bañera). Por desgracia, no había ninguna con vistas al mar. Otro inconveniente, pero el hotel no puede hacer nada al respecto, es el precio desorbitado de las tumbonas frente al hotel, en la playa: 25 euros al día, mientras que a pocos metros cuestan 13 euros. Sin embargo recomiendo este hotel por su calidad de servicio a pesar de los altibajos de mi estancia donde tuve que pagar 210 euros para que viniera un médico a recetarme Doliprane al final pero en recepción desconocían el coste del viaje.

Me encantó. Los niños y el personal de servicio (muy buen servicio) hacen demasiado ruido y es difícil dormir bien. Por lo demás, perfecto. Conseguí una habitación muy bonita y el desayuno es excelente. Buena estancia. ¡Gracias!

Excelente experiencia. Hemos estado 6 noches en este hotel. Nuestra hija de 17 años, padece una grave alergia a las tres proteínas de la leche de vaca. Durante muchos años no hemos podido estar con tranquilidad en ningún hotel. Sin embargo, nuestra experiencia con todos los profesionales de este hotel, ha sido fabulosa. Antes de llegar comunicamos el problema y nos aseguraron su control. Cuando realizamos el cheking, una trabajadora dedicada a estos aspectos, nos recibió y lo comunicó al equipo de cocina y restaurante. Cada vez que acudíamos al restaurante, a la persona que nos recepcionaba, le aparecía una alerta del problema y nos ponía en contacto directo con el chef, quien nos informaba de lo que podía tomar y, era él mismo, quien elaboraba su propia comida e incluso, la servía en la mesa a nuestra hija, para evitar contactos con el alérgeno. Gracias a los chefs Javier, Humberto y Cristian, gracias a Marcela, Nora, Carlos que nos trató con tanta empatía, Dani con sus abrazos, en fin, gracias a todo el equipo humano y profesional de este hotel.

Hemos desayunado en el hotel en familia, con muy buen servicio, muy atento y los productos de primera calidad. Carlos nos ha atendido muy bien y se ha portado genial con nosotros. Un servicio excelente, muy recomendado!