Sorprendente la calidad de la comida y la amabilidad del joven propiedad y cocinero, porque aparentemente parece un bar de carretera simple y disfruta de una cocina elaborada con estilo...volveremos desde Sant Llorenç 😉
Buen trato del propietario y servicio. Buena comida, original y casera a la vez. Postres caseros. Precios más que razonables. Muy amables al permitir al perro.