Cal Tendre en Cambrils

Un sitio que nos encanta, pero el servicio nos ha decepcionado. Muy poco interés y despreocupación por resolver nuestras dudas por parte camarera. No nos ha dado opción alternativa al menú del día, a pesar de nosotros interesarnos en que nos propusiera otras opciones. Además, al recoger los segundos platos y ver que estaban llenos (el arroz negro no estaba bueno para nuestro gusto), ella no se preocupó de preguntarnos el motivo ni de ofrecernos llevárselo. Una lástima haber marchado con este regusto con lo mucho que nos gusta este sitio. ❤️‍🩹

Si avisas antes puedes ir con tu perrito

Local coqueto con buena atencion buena cocina y gran carta y menú para escoger

Un lugar recomendable para comer bien por buen precio

Fui con amigas todo muy bueno, volveré

Comimos el plato del día, nada que decir, todo muy bueno y la camarera incluso se esforzó en hablar en francés, el postre "espuma de crème catalana" fue una delicia 😋

Estuve comiendo el domingo y super rico todo pedimos el menú para compartir y nos encantó. Volveré seguro

No hay correspondencia entre precio(alto),con la comida servida.

Un sitio estupendo. Es interior, así que no esperes vistas al mar; pero se come muy bien. Aviso eso sí que no hay cobertura. Fui dos días. El primero estaban cambiando menús y solo tenían el menú del día por 19,90. Me pedí unas navajas (no las recomiendo porque me pareció que tenían algo de tierra) y fideos rossos (riquísimos). Ese día probé también de primero los panzerotti de ricotta y setas con salsa carbonara, que me gustaron mucho (aunque aviso, son contundentes), y de segundo colita de rape al ajo (que no encajó con mis gustos personales pero estaba muy bien preparada). El segundo día fuimos un grupo grande de gente con niños pequeños. Pedimos el menú para compartir por 28,90: la paleta con el pan tumaca es toda una exquisitez, las gyozas estaban buenas (y mira que no soy mucho de gyozas) aunque para comerlas en moderación, y los mejillones deliciosos aunque hubiese preferido la mayonesa de toda la vida porque la de lima que pusieron no me gustó. De segundo pedí el arroz negro y me encantó. Probé también el rodaballo a la bilbaína y la merluza con verduras. A mí no me gustaron especialmente porque me pareció que las salsas eran demasiado fuertes y no dejaban apreciar el sabor del pescado, pero es cuestión de gustos pues los comensales que pidieron los platos sí salieron muy satisfechos. De postre la tarta de chocolate no consiguió convencerme, aunque se debe principalmente a que no soy aficionado a los postres del tipo bizcocho caliente. Conclusión, un gran sitio para ir a comer en la zona.

Hemos ido por recomendación y ha sido un acierto. Todo estaba muy rico.Servicio amable y atento. El local es pequeñito, imprescindible reservar. Volveremos.