Cafetería Lascaray en Vitoria-Gasteiz

Fuimos a tomar unos vinos, antes de acudir a la ceremonia matrimonial. Aunque había poca gente, el bar estaba sucio y las mesas y sillas llenas de vajilla sin recoger. La camarera, tardo un poco en servirnos, ya que estaba solo y no podía hacer mas de lo que hacía. Los baños estaban sucios y olía bastante mal. Espero que la próxima vez , que vaya a Vitoria-Gastéiz este mejor el local.

La camarera muy atenta y simpática.

Que pena. Ya no es lo que era. Hacia tiempo que no iba pero recordaba un trato amable y tortillas sabrosas! La camarera parece un robot! Poca simpatía. Pincho de tortilla muy normalito. Desayuno café y pincho 4.50. Opciones mucho más interesantes en el barrio. No volveré.