Café Roch en Pamplona

Buenos pinchos y muy buen servicio.

Que nadie se vaya de Pamplona sin probar el frito de pimiento!

los mejores fritos de pimiento y jamon de todo pamplona,

Carta de fritos clásica, todos los que he probado estaban muy bien. Visita obligada en lo viejo de Pamplona.

Nostálgico del Café Roch de hace una década, cuando los actuales propietarios tomaron el timón les di una oportunidad y no quedé muy satisfecho con los pintxos, a distancia de los que llevábamos años tomando. He vuelto a repetir un año después, la calidad del frito es mucho mejor pero tiene detalles cutres, como el servirlos en platos de cartón y con tenedor desechable. Esto, con el trato algo seco y el precio elevado (dos fritos y dos bebidas, 11€), quitan las ganas de volver.

Fuimos con los amigos porque nos lo habían recomendado. Nos sorprendió muy positivamente los pinchos, sobre todo el de pimiento y roquefort. El camarero Jordi fue super simpático. Seguro que volveremos

Servicio excelente! Los fritos son una maravilla

Si vais a Pamplona no podéia iros sin visitar Café Roch. El camarero, súper amable, nos explicó la historia del bar, abierto desde 1898 y que aún lo conserva el biznieto del fundador. La decoración aún conserva detalles de entonces. Probad la croqueta de roquefort i la tapa de pimiento relleno. Volveremos sin duda.

Pasamos de casualidad y nos llamó la atención su decoración, pero lo que había dentro era mucho mejor. El camarero nos atendió magnificamente y la los fritos estaban muy ricos.

Una maravilla de lugar. Si buscas tradición y autenticidad no dudes en ir. Los fritos son deliciosos y caseros ❤️