Café La Carrilana en Santiago de Compostela

El lugar es increíble, la atención siempre es genial, la comida y las bebidas geniales también. Un excelente lugar para echar drinks o tomar un café.

De los mejores lugares para tomar un cafecito con una tarta en Santiago, la comida es muy rica y el personal muy simpático.

El sándwich rico y la camarera amable. Pero el cocinero me pareció maleducado: cuando llegué y el compañero le dijo que yo venía a cenar, oí cómo le contestaba "¡Pues que espabile!" porque la cocina cerraba en 15 minutos. Pero no me pareció apropiado. Y el precio algo caro, una caña pequeña 2,50€ y un sándwich de un huevo con aguacate... 8€.

En el corazón de Santiago de Compostela. 🍷🍽🌮🫔☕️🍸🍻 A Carrilana es ideal tanto para el brunch como para el tardeo o simplemente para tomar una copa con amigos. El ambiente es muy agradable, con una energía muy acogedora. El personal destaca por su amabilidad, rapidez y eficiencia; siempre atentos sin resultar invasivos. Algo que se agradece hoy en día. En conjunto, una experiencia muy agradable que sin duda invita a repetir. Da gusto encontrar sitios así, donde todo fluye y te hacen sentir a gusto. ¡Muy recomendable!

Un bar genial. Los aperitivos son sencillos y excelentes, y cuando le pedimos a la camarera que nos trajera la tercera ronda para que nos presentara un cóctel, supo adaptarse a cada uno de nuestros gustos y sorprendernos con nuevos sabores que aún no habíamos probado. Un lugar genial que recomiendo sin dudarlo.

lindo ambiente ,buena atención ,excelente para disfrutar el momento

Uno de los mejores ambientes del casco antiguo para todas las edades; encontrarás tanto jóvenes como no. El ambiente es muy bueno, la música es de una amplia gama de géneros, siempre alegre. Un lugar muy decente, mejor que sus vecinos. El servicio fue muy bueno, pero las bebidas tardaron bastante, dos veces. No hay mucho espacio para sentarse, así que recomiendo reservar con antelación. Se llena.

Un lugar ideal, para comer por la mañana, yomar un copa por la tarde, y alternar por la noche. Gente guaoa y elegante. Javi unobde los dueños y dj en la noche, Nos vio y nos llevó donde quiso con la musica... solo un pero, no nos puso clavelitos... Natalia también dueña del local y a la que conocimos tomándonos copa al día siguiente, otra persona encantadora, con infinitva paciencia y sonrisa amigable. Un abrazo para Adolfo (pediatra y baterista, ahiblo llevas) y su encantara mujer Begoña...El servicio, de 9, siento que se tengan que encontrar con gente como nosotros. El ambiente, también de 9. Y Javi, deberías poner un cartel, no sé admiten peticiones... muchas gracias a todos. Lo pasamos regular nada mas

Opciones variadas, sabrosas, económicas y saludables. Ambiente desagradable (música demasiado alta). El número de mesas es desproporcionado en relación con la cantidad de personas atendidas, sobre todo porque la cocina es muy pequeña. Deberían eliminar el 30% de las mesas para atender a una hora decente.

Muy agradable, ambiente perfecto para tomar una copa o un combinado